Las medidas de apoyo a Pemex que el gobierno de México dio a conocer este viernes ya habían sido previstas en la última acción de calificación y no serán suficientes para prevenir el deterioro de la calidad crediticia de la compañía, advirtió Fitch Ratings.

“Las inversiones en exploración y producción se mantendrán presionadas y no ayudarán a mejorar la producción y la disminución en las reservas”, indicó la calificadora, que reconoció que la combinación de las medidas anunciadas para 2019, que suman aproximadamente 5,200 millones de dólares, pueden ayudar a reportar un Flujo de Fondos Libre neutral y a que la petrolera no incremente el nivel de deuda.

Fitch considera que las medidas dadas a conocer hoy son menores a los requerimientos de efectivo anuales adicionales necesarios para que Pemex detenga la caída en su producción y en su nivel de reservas, que se calculan entre 12,000 y 17,000 millones de dólares.

Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer un plan con el que pretende reducir la carga fiscal de la empresa productiva del Estado y que contempla una capitalización por 25,000 millones de pesos.

A pesar de lo anterior, la agencia calificadora, que ubicó el perfil crediticio de Pemex en ‘CCC’ el 29 de enero, señaló que es improbable que estas acciones mejoren el perfil crediticio individual en escala internacional.

“Mientras el perfil crediticio individual de Pemex esté en ‘CCC’ o por debajo, Fitch continuará evaluando las consecuencias socio-políticas y financieras de un incumplimiento como “fuertes”, indicó el comunicado.

La agencia bajó la calificación de Pemex en escala nacional a ‘AA(mex)’ de AAA(mex) y el Issuer Default Rating (IDR) en escala internacional en moneda extranjera y en moneda local a ‘BBB-‘ desde ‘BBB+’ con Perspectiva Negativa.

El apoyo anunciado por la administración federal incluye 1,250 millones de dólares en inyección de capital, 1,750 millones de amortización anticipada de los bonos de gobierno recibidos para apoyo en obligaciones por pensiones en 2017 y 750 millones de dólares de reducción en las transferencias del gobierno.

Además, Pemex y el gobierno de México estiman generar 1,600 millones de dólares en ahorros derivados de las medidas tomadas para reducir el robo de combustible, también conocido como huachicoleo.