La Comisión Europea propuso este miércoles un nuevo plan con jornadas más cortas, con el apoyo de los Estados, para ayudar a los ciudadanos a conservar sus empleos durante el duro golpe del brote de coronavirus en las economías de los 27 países de la Unión Europea.
Europa es el continente más afectado por la pandemia de coronavirus que tuvo su primer registró el 31 de diciembre de 2019 en Wuhan China; hasta ahora se han reportado por lo menos 30,000 COVID-19.
Luego de que el Fondo Monetario de Internacional (FMI) declaró el pasado 27 de marzo el inicio de una recesión económica global, su impacto sigue siendo una incógnita para los expertos.
Este plan se basa en el programa Kurzarbeit alemán, e cual dictamina que el Estado subsidia parte de los salarios de la clase trabajadora para evitar que se recorten puestos de trabajo a pesar de la desaceleración.
“Las empresas están pagando los salarios a sus empleados incluso cuando, como en este momento, no están ganando dinero. Europa viene ahora en su apoyo con una nueva iniciativa”, aseguró en un mensaje de vídeo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
“El objetivo es ayudar a Italia, España y todos los demás países que han sido duramente afectados. Y es algo que se hará gracias a la solidaridad de los demás Estados miembros”, dijo Von der Leyen, añadiendo que el plan estará garantizado por todos los países de la UE, si bien no precisó cómo se financiará.
Por su parte, la Comisión Europea estudia cómo adaptar su propuesta de Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027 que debe presentar en los próximos días.
“Esto incluirá un paquete de estímulo que garantizará que la cohesión dentro de la Unión se mantenga a través de la solidaridad y la responsabilidad”, declaró el sábado pasado la titular del ejecutivo comunitario.