El Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido avanzó con fuerza hasta 4.8% en el segundo trimestre, gracias a la reapertura de la economía tras el confinamiento a causa del segundo repunte de contagios por COVID-19 a principios de año, anunció este jueves la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).

El PIB se está recuperando después de la caída de 1.6% en el primer trimestre. Sin embargo, aún no ha regresado a su nivel de prepandemia, ya que es 4.4% inferior respecto a finales del 2019.

Durante el segundo trimestre, la actividad mejoró debido al levantamiento progresivo de las restricciones sanitarias; en concreto con  la reapertura de bares y restaurantes. 

El PIB se sostuvo sobre todo por el gasto de los hogares (+7.3%), mientras que la inversión disminuyó ligeramente (-0.5%).

Además, el crecimiento se aceleró en junio hasta 1%, más que en mayo (+0.6%), pero menos que en abril (+2.2%), el primer mes después del confinamiento de comienzos de año.

“En junio, la economía británica continuó recuperándose con fuerza y el sector de la hostelería y la restauración se beneficiaron del primer mes completo en el que fue posible comer en el interior”, señaló Jonathan Athow, un responsable de estadística de la ONS.

Por su parte, el gobierno acogió con satisfacción el avance económico. 

“Nuestra economía está mejorando y muestra fuertes signos de recuperación, gracias a nuestro plan de empleo y al éxito de nuestro programa de vacunación”, indicó el ministro de Finanzas, Rishi Sunak.

El responsable de la economía británica precisó que el Reino Unido presenta la tasa de crecimiento más rápido del G7, aunque advierte que “todavía hay retos por superar”.

Reino Unido ha sido uno de los países desarrollados más afectados por la crisis sanitaria, con una caída del PIB de cerca de 10% el año pasado, la peor en 300 años, y un balance de más de 130,000 fallecidos por coronavirus.

Alta inflación, misma política monetaria

Los registros de inflación en el Reino Unido muestran que los precios al consumidor han registrado un repunte, para junio del 2021 la tasa de inflación se situó en 2.5%, valor que se encuentra fuera del objetivo del Banco de Inglaterra (BoE) que es de 2%.

Sin embargo, el BoE optó, la semana pasada, por mantener sin cambios su política económica, dejando sin cambios su tasa de interés en 0.1%; además, señaló que el incremento de los precios al consumidor es temporal.

Por si fuera poco, la entidad monetaria informó que su programa de compra de activos por 895,000 millones de libras no recibirá ningún ajuste hasta el momento.

Con información de AFP