La Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio de la Unión Americana confirmó que la economía de Estados Unidos se ubicó en fase recesiva durante la primera mitad del 2022.

Con la tercera y última estimación ratificó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país vecino y presidido por Joe Biden, registró una caída de 0.6% a tasa anualizada, con ajuste estacionario, en el segundo trimestre del año.

La menor disminución en el segundo trimestre, en comparación con el primer trimestre, reflejó un repunte en las exportaciones y una aceleración en el gasto de los consumidores

según BEA.

 

PIB EU

Esta disminución fue igual a la segunda estimación y reafirmó que el PIB estadounidense se colocó en un escenario de recesión, ya que en el primer trimestre la economía más grande del mundo se contrajo 1.6%.

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Panorama sombrío

El panorama para la economía norteamericana resultaría más sombrío debido al endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal (Fed).

Es decir, el ciclo alcista de la tasa de interés, cuyo fin en desacelerar la inflación, inhibe el consumo privado, principal fuente de ingresos del PIB.

Recientemente el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Fed aumentó en 75 puntos base la tasa de referencia, que se trató del tercer incremento en la misma magnitud para ubicarla en un rango de 3.00 a 3.25%, el más alto desde principios de 2008.

La decisión de la Fed se da en medio de una inflación que parece desacelerarse, luego de que en agosto se situó en 8.3% anual y el mercado laboral luce fuerte.

Por sector

Por sector, la disminución del PIB derivó de caídas en inversión privada en inventario, inversión fija residencial y no residencial y gasto de los gobiernos federal, estatal y local.

Mientras los aumentos se dieron en exportaciones y consumo privado. Las importaciones, que son una resta en el cálculo del PIB, crecieron.