El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos se expandió a una tasa anualizada de 3.2% durante el primer trimestre, cifra superior a la estimada por analistas.

La Reserva Federal de Atlanta estimó que el PIB creció 2.8% entre enero y marzo a tasa anual, ajustada por estacionalidad, Barclays esperaba un incremento de 2.5%  y analistas consultados por Refinitiv preveían un alza de 1.9%.

El crecimiento de la economía de EU representó el mayor para un mismo periodo desde 2015, cuando fue de 3.3%.

El fuerte avance del PIB puede poner a descansar a quienes temen que una recesión de la principal economía del mundo está a la vuelta de la esquina y puede regresar a la escena la expectativa de un incremento en las tasas de interés, hoy descontadas por los analistas, lo que metería ruido al mercado accionario.

Antes de la publicación de los datos, CI Banco advirtió que un dato muy positivo del PIB de Estados Unidos podría provocar una apreciación generalizada del dólar, corrigiendo o depreciando varias monedas emergentes, incluido el peso mexicano.

El crecimiento de EU en este periodo desafió obstáculos como el cierre parcial de gobierno, la incertidumbre por las conversaciones comerciales con China y una revisión a la baja en el crecimiento de la economía mundial.

La expansión reflejó las contribuciones positivas de los gastos de consumo personal, la inversión en inventarios privados, las exportaciones, el gasto estatal y local del gobierno y la inversión fija no residencial y una disminución en las importaciones

informó el Departamento de Comercio de Estados Unidos.

Las exportaciones avanzaron a una tasa anualizada de 3.7%, respecto al primer trimestre de 2018, mientras que las importaciones retrocedieron en la misma magnitud, subrayó Banco Base.

El gasto del consumidor -que representa dos tercios del PIB- creció 1.2%, moderando su ritmo tras subir 2.5% en el trimestre previo, pero la inversión privada sorprendió al crecer 5.1% y el consumo de gobierno creció 2.4%, recuperándose de un retroceso de 0.4% en el último trimestre de 2018, detalló la institución.

Sobre el impacto del cierre parcial de gobierno -entre diciembre y enero-, el Departamento de Comercio estimó que la reducción en los servicios provistos por el gobierno federal restó 0.3% al PIB de EU.