Estados y los parlamentarios de la Unión Europea llegaron a un acuerdo este lunes para que sea posible unirse y presentar demandas colectivas contra empresas por servicios defectuosos.

Para evitar los excesos que se observan en Estados Unidos con este tipo de demandas, incorporaron una serie de salvaguardias.

El movimiento para impulsar los derechos de los consumidores ganó apoyos tras el escándalo de Volkswagen sobre la manipulación de las emisiones contaminantes, que ha dado lugar a la apertura de miles de investigaciones y a la presentación de demandas.

Según el Parlamento Europeo, tales demandas podrían cubrir la protección de datos, los servicios financieros, los viajes y el turismo, la energía, las telecomunicaciones, el medio ambiente y la salud, así como los derechos de los pasajeros de avión y de tren.

El acuerdo entre los representantes de los Estados de la UE y el Parlamento Europeo deberá ser sellado por los 27 países miembros del bloque y su órgano legislativo en las próximas semanas. El bloque dispondrá de dos años para insertar la normativa de la UE en legislación nacional.

La Comisión Europea anunció la propuesta en 2018, pero se retrasó por desacuerdos entre los países de la UE y los europarlamentarios.

“Hemos buscado un equilibrio entre la protección legítima de los intereses de los consumidores y la necesidad de seguridad jurídica para las empresas”, dijo el europarlamentario Geoffroy Didier en un comunicado.

El grupo europeo de defensa de los consumidores BEUC acogió con satisfacción el acuerdo.

“Este acuerdo es un gran hito para poner la justicia al alcance de todos los consumidores de la UE. Los consumidores pueden acudir por fin a los tribunales de forma colectiva cuando sus derechos se vean perjudicados por el mismo comerciante”, dijo la directora general de BEUC, Monique Goyens.

Según el acuerdo, cada país de la UE tendrá que nombrar al menos una organización de consumidores u organismo público para iniciar las acciones colectivas en nombre de los consumidores.

Entre las salvaguardias para evitar litigios con escaso fundamento o abusivos se incluye el principio de “el perdedor paga”, que garantiza que la parte derrotada en un pleito pague las costas del procedimiento a la parte ganadora.

Las demandas colectivas en México

Las acciones colectivas son vigentes en México desde 2012, luego de que se publicara el decreto el 30 de agosto de 2011 con el cual se reformaron el Código Federal de Procedimientos Civiles, el Código Civil Federal, la Ley Federal de Competencia Económica, la Ley Federal de Protección al Consumidor, la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente y la Ley de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros

A través de este recurso legal, consumidores pueden unirse para defender y exigir judicialmente la reparación del daño por la violación de sus derechos difusos, colectivos en sentido estricto o individuales homogéneos, en las relaciones de consumo de bienes o servicios, públicos o privados, o en materia ecológica y del medio ambiente por parte de la parte demandada.

La regulación de las demandas colectivas, contemplan leyes de la materia que se trate, en consumo, en competencia, incluso en derecho ambiental.

En México, por ejemplo, Profeco ganó una demanda colectiva durante 2019 en contra de AT&T México por cobros indebidos y prestación deficiente de servicios.