La farmacéutica india Bharat Biotech informó que su vacuna Covaxin, que fue muy criticada por lanzarse antes de los estudios finales, alcanzó una eficacia de casi el 81% en la prevención contra el COVID-19.

Su efectividad despertó preguntas en el cuerpo médico después de que fuera autorizada en enero por funcionarios para casos de urgencia, pese a que sus pruebas en Fase 3 -última etapa antes de la aprobación definitiva- aún no estaban completas.

“Covaxin (no solamente) demuestra una tendencia hacia una alta eficacia clínica contra el COVID-19, sino también una inmunogencidad (capacidad de un antígeno para inducir hacia una respuesta inmunológica) significativa contra las variantes que emergen inesperadamente”, dijo Krishna Ella, presidente de Baharat Biotech.

La firma añadió que los “efectos adversos graves, que necesitaron asistencia médica se dieron a niveles muy bajos y estuvieron equilibrados entre los grupos de vacuna y placebo”.

Covaxin junto a Covishield, de AstraZeneca/Oxford, también fabricada en India, son las dos vacunas autorizadas en el país.

La falta de datos sobre Covaxin, cuando comenzó la campaña de vacunación a mediados de enero, despertó desconfianza, puesto que miembros del personal sanitario, incluso médicos, se habían negado a vacunarse.

El primer ministro, Narendra Modi, recibió el lunes una dosis de Covaxin, cuando se extendió la inoculación a mayores de 60 años y de 45 con patologías graves.

India acumula 11.1 millones de casos acumulados de la enfermedad respiratoria y se coloca como en segundo lugar en términos absolutos, solo superado por Estados Unidos, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins.

Con información de AFP