Las acciones tecnológicas sufrieron fuertes caídas en el primer semestre de 2022, un desvanecimiento que repercutió en la fortuna de las 100 personas más ricas de Estados Unidos, cuyo patrimonio neto redujo 622,000 millones de dólares desde noviembre, la mayor pérdida sostenida en la historia del índice de multimillonarios de Bloomberg.

El desplome de las principales empresas de tecnología se deriva de las presiones inflacionarias presentes en todo el mundo, los temores por una posible recesión, así como los aumentos en la tasa de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).

Estas situaciones han provocado una disminución en la fortuna de los hombres más ricos del mundo, ya que en el primer semestre el CEO de Tesla, Elon Musk, redujo su fortuna en 61.8 millones de dólares, no obstante, Musk continúa liderando el índice de multimillonarios de Bloomberg, con un patrimonio neto que asciende a 244,000 millones de dólares.

Jeff Bezos, fundador de Amazon, también vio caer su riqueza en 62.7 millones de dólares, ocupando el segundo lugar de la lista de los más ricos con un patrimonio neto de 145,000 millones de dólares.

No obstante, el índice de multimillonarios de Bloomberg, que ha rastreado a las 100 personas más ricas de Estados Unidos durante casi ocho años, ha determinado que sus activos combinados han crecido en más de 1 billón de dólares

Por tanto, más de la mitad fluyó a solo 10 personas, los principales Elon Musk y Jeff Bezos, además de ocho multimillonarios restantes cuyas principales fuentes de riqueza explotaron en valor durante el repunte de la pandemia

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Pandemia benefició a los más ricos

En los primeros días de la pandemia, cuando los mercados se desplomaron y 22 millones de estadounidenses perdieron sus empleos, el Congreso y la Reserva Federal se pusieron en acción para estabilizar una economía en riesgo de colapsar. 

Después de que el gobierno de Estados Unidos apoyó con préstamos ‘baratos’ para aliviar la crisis derivada por la pandemia de COVID-19, los hogares estadounidenses lograron ahorrar en números récord, sin embargo, el único grupo que se vio beneficiado y que menos lo necesitaba fueron los multimillonarios.

Los niveles de riqueza de Estados Unidos denotan una composición muy diferente del patrimonio del resto de la población, los cuales son responsables del desequilibrio económico de los otros hogares.

Además, las acciones y fondos mutuos constituían más de un tercio de las fortunas de los estadounidenses más ricos al comienzo de la pandemia. 

Eso significó que el 1% superior disfrutó de un alza sustancial a medida que las acciones se dispararon, debido al estímulo y entusiasmo de los inversionistas por cualquier cosa que pudiera ganar con el cambio al trabajo remoto y los patrones de gasto cambiantes de los consumidores bloqueados. 

La ventaja para el 50% inferior, que prácticamente no poseía acciones, fue nula.

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La manía bursátil también impulsó los valores de las empresas privadas, alentando las ventas y las fusiones, lo que generó ganancias inesperadas que cayeron en cascada en gran medida hacia los multimillonarios. 

Lo mismo ocurre con el lado negativo: la caída de los mercados y acciones tecnológicas este año afectará desmesuradamente a la fortuna de los multimillonarios, pero dos años de ganancias excepcionales, durante los cuales muchos inversionistas adinerados aprovecharon las oportunidades para vender en su punto máximo, aliviarán su posible reducción monetaria.

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Con información de Bloomberg