La Eurozona registró un crecimiento del 1.8% del PIB en 2018, lo que representa una desaceleración de más de medio punto respecto a 2017 en un contexto de incertidumbre por el Brexit.
Frente al 2.4% en 2017, el PIB del conjunto de los 19 países de la zona euro creció 1.8% interanual en 2018, anunció este jueves Eurostat.
En el último trimestre del año, la expansión del PIB se mantuvo también estable en 0.2%, respecto al trimestre anterior, precisó esta oficina de la Comisión Europea.
“El panorama general sigue siendo que este fue un final de año decepcionante” y “las perspectivas para el primer trimestre de este año no se ven mejor”, dijo Andrew Kenningham, economista de Capital Economics.
En noviembre, la Comisión ya se vio obligada a rebajar sus expectativas de crecimiento al 2.1% del PIB para 2018, al apuntar a una “creciente incertidumbre a nivel mundial”.
El Banco Central Europeo (BCE) trazó de nuevo este panorama al constatar una “ralentización” del crecimiento mundial a causa de las amenazas de guerra comercial, que afectan a la Eurozona.
Final de año ‘decepcionante’
Alemania, la primera economía europea, no escapa de este análisis. Para Bert Colijn, economista del banco ING, “el final del año estuvo marcado por una decepcionante recuperación de la producción de automóviles”.
El PIB de Francia, segunda economía de la zona euro, se desaceleró en 2018 ocho décimas hasta el 1.5%, en un contexto de protestas de los ‘chalecos amarillos’, quienes marcaron también el final del año, según Colijn.
Tras el fuerte crecimiento de los últimos años, la expansión en España se desaceleró en 2018 al 2.5%, aunque la cuarta economía de la zona euro se mantiene por encima de la media de la Eurozona.
La atención se centra en cambio en la tercera economía, Italia, cuyo instituto nacional de estadística anunció este jueves que entró en recesión, lo que “acentúa la inquietud sobre estabilidad política”, según Colijn.
La Comisión Europea debe presentar la próxima semanas sus nuevas proyecciones, semanas después que el Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostrara menos optimista sobre la expansión de los países del euro.
La institución monetaria con sede en Washington rebajó el crecimiento de la Eurozona para 2019 del 1.9% al 1.6%, apuntando a las inquietudes sobre el resultado del proceso de retirada de Reino Unido de la UE.
“Es imperativo que los dirigentes políticos terminen rápidamente con esta incertidumbre” sobre el Brexit, declaró entonces la nueva jefa economista del FMI, Gita Gopitath, en el Foro Económico Mundial (WEF) de Davos.
Otras de las amenazas para la economía europea vienen del exterior, especialmente de la tensión comercial mundial con Estados Unidos y China.
Eurostat publicó también sus datos sobre desempleo en la Eurozona, que se mantuvo estable en diciembre en 7.9%, su nivel más bajo desde octubre de 2008. El desempleo juvenil se mantuvo en 16.6%.
El porcentaje de desempleados alcanzó 12.1% en el momento álgido de la crisis de la deuda, entre abril y junio de 2013. Desde entonces, la situación mejoró y se acerca a la media previa a la crisis financiera mundial de 2008, cuando se situaba en 7.5%.
Con información de Reuters y AFP