Corte Suprema respalda a Donald Trump: hijos de migrantes no podrán tener la ciudadanía
En una decisión sin precedentes, la Corte Suprema de Estados Unidos avaló este viernes una orden ejecutiva del presidente Donald Trump que limita el derecho a la ciudadanía para los hijos de inmigrantes nacidos en territorio estadounidense.
El fallo modifica el alcance de la Decimocuarta Enmienda de la Constitución, que desde 1898 garantiza ese derecho.
Fotoarte: Mariana FloresJueces pierden poder ante orden de Donald Trump
La resolución del máximo tribunal restringe la facultad de los jueces locales y federales para frenar la orden ejecutiva sobre el derecho a la ciudadanía por nacimiento. Esta medida fue impugnada por organizaciones civiles y varios estados gobernados por demócratas.
Aunque tres jueces consideraron la orden de Trump como inconstitucional, las apelaciones presentadas para bloquearla fueron finalmente desestimadas.
La Corte Suprema ordenó ahora que los casos abiertos para bloquear la orden regresen a instancias inferiores, que podrán evaluar si imponen suspensiones temporales a nivel regional.
¡GRAN VICTORIA en la Corte Suprema de Estados Unidos!
escribió Trump en su red social Truth Social.
Además, calificó el derecho de ciudadanía por nacimiento como un “engaño” diseñado para los hijos de esclavos, no para el proceso migratorio actual. También agradeció a su equipo legal, incluyendo a la fiscal general, Pam Bondi, y al procurador John Sauer por impulsar la defensa de la orden.
¿Qué cambia con esta decisión?
La norma promovida por Trump entrará en vigor en 30 días y restringe el derecho de los bebés nacidos por al menos un progenitor ciudadano estadounidense o residente permanente al acceso a la ciudadanía. Esto también incluye a los hijos de personas con visas temporales que viajan al país para tenerlos ahí.
Con esta política los hijos de indocumentados que son estadounidenses no tendrían ningún derecho a serlo, lo que también limitaría su acceso a la salud, a la educación y otros programas sociales.
El principio de “jus soli” (derecho de suelo) que ha estado vigente por 160 años, según el cual toda persona nacida en territorio estadounidense adquiere la ciudadanía, fue ratificado por primera vez en 1898 en un caso que amparaba a un hijo de migrantes chinos.
Desde entonces ha sido piedra angular de la política migratoria estadounidense y uno de los principales motivos por los que las personas migran hacia el país.
La nueva decisión marca un cambio radical que reaviva el debate y crítica sobre la constitucionalidad de las acciones ejecutivas de Trump respecto a su política migratoria, ya que en teoría el presidente no puede eliminar la ciudadanía por derecho, para ello debe obtener los votos de la Cámara de Representantes y del Senado.
Con información de CNBC y Bloomberg
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