El presidente Donald Trump firmó este miércoles un decreto de migración que ordena la suspensión temporal de otorgamiento de residencias permanentes a Estados Unidos durante la pandemia de coronavirus.

“Esto asegura que los trabajadores estadounidenses desempleados sean los primeros en recuperar su trabajo cuando la economía reabra”, sostuvo Trump en una rueda de prensa tras promulgar el decreto

La firma se realizó pese a que funcionaros de la Casa Blanca aseguraron que podría postergarse aprobación de un plan de migración para detener temporalmente la entrega de residencia permanente a extranjeros, que -dice- busca proteger a los trabajadores nacionales en medio de la pandemia de COVID-19, informó el miércoles una colaboradora.

La asesora de la Casa Blanca, Kellyanne Conway, dijo que abogados revisaron los detalles del decreto que Trump planeaba firmar el miércoles.

“Tiene que ser aprobado legalmente”, dijo Conway a periodistas. “Yo sé que él está ansioso por firmarlo, pero es un tema del momento en el que esté listo”, agregó.

Un funcionario de la Casa Blanca que solicitó la condición de anonimato para discutir el proceso también sugirió que los plazos del decreto podrían retrasarse.

“Los abogados aún lo están modificando y resolviendo los detalles”, dijo la fuente a Reuters. “No sé si va a estar listo para su firma esta noche. Es algo complejo”, agregó.

El republicano llegó a la Casa Blanca en 2016, en parte, gracias a su promesa de frenar la inmigración. Sus críticos vieron el anuncio como un intento de sacar ventaja de la crisis del coronavirus para implementar un objetivo político que ha buscado por largo tiempo de cara a la elección presidencial de este año, en la que buscará la reelección.

Una persona con conocimiento del debate interno en la Casa Blanca dijo que Trump y sus asesores discutieron el decreto durante el fin de semana y que la decisión apuntaba a complacer a su base electoral.

“Él siempre ha querido esto”, dijo la fuente. “Pero ahora, bajo esta pandemia, perfectamente puede hacerlo”.

Grupos empresariales expresaron su oposición al plan de Trump el martes, argumentando que frenar la migración deprimiría aun más la economía.

Michael Clemens, miembro senior del grupo de expertos Centro para el Desarrollo Global con sede en Washington, dijo que la variedad de industrias que serían afectadas incluye a algunas que son críticas durante una emergencia sanitaria, como el procesamiento de alimentos, bodegas, transporte, cuidado de adultos mayores y niños, las comunicaciones y la tecnología.

Aún se desconocen mucho detalles clave del decreto de migración planeado por Trump, pero si bien la medida podría impedir que muchas personas soliciten la residencia permanente desde fuera de Estados Unidos, no está claro cómo afectará a quienes ya están en el país y buscan conseguir la “green card”.