Los rebrotes de contagios de COVID-19 han obligado a las autoridades a cerrar parcialmente las actividades clasificadas como no esenciales. 

El viernes 2 de octubre Madrid impuso nuevas restricciones y ahora España ordenó el confinamiento de otras dos ciudades; en París se encuentran en “alerta máxima” y se cerrarán bares, cafés y otros negocios; mientras que en Nueva York se evalúa reconfinar nueve barrios.

Hasta el 5 de octubre, el mundo tiene 35.2 millones de casos confirmados de COVID-19 y el fallecimiento de un millón 38,000 personas, según la Universidad Johns Hopkins. 

León y Palencia cierran en España

Luego de Madrid, otras dos ciudades españolas, León y Palencia, serán objeto desde este martes de un cierre parcial para frenar el avance del COVID-19.

 

León y Palencia, dos ciudades de 125,000 y 79,000 habitantes respectivamente, estarán parcialmente cerradas durante al menos dos semanas, al igual que lo están Madrid y nueve municipios de su periferia desde el viernes por la noche. 

En la región de Madrid, los más de 4.5 millones de habitantes afectados por estas restricciones en la capital y las ciudades vecinas pueden circular libremente de su municipio, pero solo se les permite salir para necesidades básicas como ir a trabajar, estudiar o al médico.

El país tiene 789,900 casos confirmados y 32,000 muertes, según la Universidad Johns Hopkins. 

París ante el cierre de cafés y bares 

París decretó este lunes estado de alerta máxima por el avance de la pandemia, lo que conlleva al cierre de todos sus cafés y bares. 

“Entramos en una nueva fase”, declaró en tono solemne la alcaldesa Anne Hidalgo y detalló que nuevas restricciones se aplicarán a partir del martes en París y en su periferia más cercana, un territorio de más de siete millones de personas. 

Además de los cafés y bares, permanecerán cerrados los gimnasios y seguirán prohibidos los eventos con más de 1,000 personas así como las reuniones de más de 10 personas en los espacios públicos. 

Los restaurantes, en cambio, podrán permanecer abiertos, siempre y cuando respeten nuevas medidas sanitarias de seguridad, como limitar los grupos de comensales a seis personas, poner un dispensador de gel desinfectante de manos en cada mesa y la posibilidad de que los clientes se quiten la mascarilla solo para comer y no durante la sobremesa.  

Las universidades deberán restringir la asistencia presencial en un 50%. 

Además de París, otras cinco ciudades -Lille, Lyon, Grenoble, Toulouse y Saint-Etienne- también podrían pasar a alerta máxima pronto, un nivel que precede a la urgencia sanitaria y en el que se encuentran ya desde hace más de una semana Marsella y la isla francesa de Guadalupe en el Caribe. 

En las últimas 24 horas se han registrado en el país 12,565 nuevas infecciones para totalizar 663,900 personas y el deceso de 32,300.

Nueva York evalúa cierre de nueve barrios

La ciudad estadounidense planea volver a cerrar escuelas, restaurantes y comercios no esenciales en nueve barrios de Brooklyn y Queens, donde los casos de COVID-19 se han multiplicado en las últimas dos semanas.

“Hoy, desafortunadamente, no es un día de celebración”, dijo el alcalde Bill de Blasio, al anunciar que busca reconfinar esos barrios a partir del miércoles.

Los neoyorquinos han trabajado duro para domar al COVID-19 y no hacemos esta propuesta a la ligera,

destacó el alcalde demócrata. 

Si la medida es aprobada será el primer retroceso en el desconfinamiento de la ciudad. Pero el gobernador Cuomo, que sostiene tensas relaciones con De Blasio, no respondió de inmediato al pedido del alcalde. 

Seis de los nueve barrios aludidos están en Brooklyn y tienen grandes poblaciones de judíos ortodoxos, entre las cuales el virus se ha expandido rápidamente en las últimas semanas.

Los otros tres barrios están en Queens, y entre ellos hay uno próximo al aeropuerto John F. Kennedy. 

La ciudad también está monitoreando 11 vecindarios adicionales, que De Blasio describió como una “preocupación real”. 

Las salas internas de los restaurantes, que habían sido autorizadas a reabrir, así como los gimnasios y piscinas tendrían también que volver a cerrar.

Reino Unidos e Italia intentan frenar segunda ola

El Gobierno británico anunció hace unos días que haría más estrictas algunas normas de reuniones sociales en el norte de Inglaterra a partir del 30 de septiembre, en respuesta al acelerado aumento de las infecciones de COVID-19 en la región. 

En las áreas más afectadas, que incluyen centros urbanos importantes como Newcastle, Gateshead, Sunderland y Durham, las personas recibirán multas si se les detecta reuniéndose con otros residentes en espacios cerrados, incluyendo sus propias casas, pubs y restaurantes.

Pese a que las infecciones se aceleran en diferentes partes de Reino Unido, el Gobierno ha dicho que desea evitar una segunda cuarentena nacional.

Reino Unido sufre el mayor número de muertes por coronavirus en Europa, por encima de 42,400 y 518,200 casos acumulados.

En tanto, el gobierno de Italia estudia el panorama que enfrenta debido a una segunda ola de coronavirus en el país. 

De acuerdo con CNN, el 1 de octubre se registraron más 2,500 contagios de COVID-19 que totalizan 327,500 casos confirmados y la muerte de 36,000 personas.

Con información de AFP y Reuters