Los médicos alemanes que tratan al líder opositor ruso Alexei Navalny en un hospital de Berlín dijeron el lunes que los exámenes médicos indicaron un envenenamiento que sucedió antes de colapsar en un avión en Rusia la semana pasada.

Navalny, principal crítico del presidente ruso Vladimir Putin, fue llevado a Alemania para ser tratado el sábado. El Kremlin arguye que no estaba claro qué causó la enfermedad de Navalny y que los exámenes iniciales no mostraron que fue envenenado, como denunciaron sus asesores.

El hospital Charite de Berlín dijo que un equipo de médicos lo examinó minuciosamente después de su llegada.

Los hallazgos clínicos indican envenenamiento con una sustancia del grupo de inhibidores de la colinesterasa. La sustancia específica involucrada sigue siendo desconocida y se ha iniciado una nueva serie de pruebas exhaustivas”

dijo el hospital en un comunicado.

Navalny ha sido un problema para el Kremlin por más de una década, exponiendo lo que él dice que es un robo en las altas esferas y movilizando multitudes de jóvenes manifestantes.

Ha sido detenido repetidamente por organizar reuniones públicas y mítines y demandado por sus investigaciones sobre corrupción, además se le prohibió presentarse a las elecciones presidenciales de 2018.

El gobierno alemán dijo antes que Navalny es custodiado en el hospital debido a la preocupación por su seguridad.

“La sospecha es que el señor Navalny fue envenenado, dado que lamentablemente la reciente historia rusa ha tenido varios casos sospechosos de este tipo”, dijo a periodistas el principal portavoz de la canciller alemana Angela Merkel, Steffen Seibert.

Detallaron que Navalny es atendido en cuidados intensivos y que permanecía en un coma inducido médicamente. Aunque su condición era grave, no era de vida o muerte, añadieron.

El gobierno ruso no hizo ningún comentario inmediato sobre la declaración alemana.

Sin embargo, el incidente puede tensar aun más las relaciones de Rusia con sus vecinos europeos y de la OTAN, que la han acusado de aumentar los ataques a los disidentes en Europa en el pasado, imputaciones que Rusia ha desestimado.

Por lo pronto, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, pidió el lunes a las autoridades rusas una “investigación independiente y transparente” sobre el envenenamiento del líder opositor ruso Alexéi Navalni.

“Es imperativo que las autoridades rusas inicien cuanto antes una investigación independiente y transparente sobre el envenenamiento de Navalni”, declaró Borrell en un comunicado.

Con información de AFP