El consumo de los hogares mexicanos mostró un desempeño positivo durante octubre pasado, derivado de que las menores disrupciones en las cadenas globales de valor impulsaron el sector automotriz.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los ingresos por suministro de bienes y servicios del comercio minorista crecieron 0.74% en el décimo mes del 2022, respecto a septiembre.
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Este aumento, que se dio tras dos caídas al hilo, significó la mayor alza en los últimos ocho meses, así como el segundo mejor resultado en el año. Además, superó a las expectativas del mercado que esperaban una tasa de 0.30%.
El resultado vino acompañado de un alza igualmente buena de las ventas al por mayor, que subieron 0.44% mensual y proveen evidencia de que la resiliencia del consumo sigue vigente en el cuarto trimestre del año
recalcó Monex.
Para el grupo financiero, el desempeño de las ventas minoristas brinda cierto equilibrio a las expectativas para el cierre del 2022, ya que otros indicadores anticipan un escenario de estancamiento tanto en la industria como en los servicios.
Ventas de automóviles, el estímulo
El estímulo del comercio minorista, que es el principal indicador del consumo privado, fue la venta de automóviles y camiones con un crecimiento mensual de 8.01%, el mayor en 19 meses.
Dicho ascenso fue el mayor de los 22 subíndices que se consideran en el comercio al por menor, aunque se empaña por las caídas de 0.44% en autopartes y de 5.41% en la venta de motocicletas y otros vehículos de motor.
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Monex expuso que ajeno a los temas de crecimiento, el fuerte desempeño de las ventas podría derivar en mayores presiones para la inflación.
Sin embargo, añadió que en el caso de octubre las noticias son positivas, pues los aumentos se concentraron en el sector automotriz y en el de enseres domésticos, cuyas ventas se habían paralizado por las disrupciones en las cadenas globales de valor.
De hecho, agregó que los subíndices de muebles y de automóviles tuvieron fuertes caídas en tres de los últimos cuatro meses que responden a la escasez de inventario en los respectivos mercados y por lo tanto, fueron fuente de presión para los precios durante un largo periodo.
Por lo mismo, el grupo financiero pide cautela en la interpretación de los datos y esperar a que la dinámica se repita en noviembre para discernir mejor la tendencia del consumo, debido a que el resto de los sectores tuvieron movimientos más acotados e incluso negativos.
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Comercio da respiro
Los resultados de las empresas comerciales en el décimo mes del año permiten cierto respiro en el margen de la coyuntura económica local, pues demuestran que el que ha sido el principal motor de crecimiento durante el 2022 no frenará su inercia de manera súbita, según Monex.
No obstante, es difícil que los resultados sigan constantes ante las adversas condiciones de política monetaria y desgaste en la inflación, por lo que creemos que en 2023 habrá una desaceleración notable en los rubros que hoy impulsan el avance del índice general
advirtió el grupo financiero.
Por último, previó un crecimiento cercano a 1.5% para las ventas al por menor durante todo el 2023, menos de la mitad del casi 4.5% que se perfila para el cierre de este año.
