El presidente Andrés Manuel López Obrador ya presentó dos versiones del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC) y sus efectos aún no se reflejan en los bolsillos de los mexicanos, ya que los precios de los productos del plan antiinflacionario siguen por las nubes.
Durante la primera quincena del décimo mes del 2022, el Índice PACIC, realizado por EL CEO, creció 15.84% a tasa anual, la mayor variación desde la primera mitad de junio de 1999, cuando la inflación en la que se utilizaron ponderadores del índice de precios al consumidor del Inegi, llegó a 15.86%.
Mientras en comparación con la segunda quincena de septiembre, se registró una caída de 0.13%, la primera disminución en lo que va de este 2022.
La caída en el corto plazo de los precios del PACIC en los primeros quince días de octubre corresponde a los efectos de base de comparación y estacionarios, debido a que en su comparativo anual la inflación del programa federal alcanzó máximos de más de 23 años.
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El retroceso del índice de precios del PACIC obedeció a que productos como papa, naranja y cebolla tuvieron descensos de doble dígito por el ciclo agrícola estacionario, cuando en semanas previas fueron los alimentos con los mayores incrementos.
Sin efectos de las dos versiones del PACIC
La primera fase del plan antiinflacionario de Andrés Manuel López Obrador no cumplió su meta primordial de proteger el bolsillo de los hogares del país, ya que desde que se anunció el pasado 4 de mayo, la inflación PACIC se aceleró.
La variación anual del paquete que pretende bajar o estabilizar los precios de 24 productos de la canasta alimentaria fue de 13.09% en mayo, 13.84% en junio, 14.58% en julio, 15.14% en agosto, 15.55% en septiembre y 15.84% en la primera mitad de octubre.
El PACIC 2.0 se lanzó en los primeros días de octubre y aún no se observan resultados, por lo que en lo que resta del año se espera ver el impacto de la nueva versión en la que el gobierno federal y la iniciativa privada acordaron que el precio de la canasta de 24 productos será de 1,039 pesos, menor a 1,129 pesos actuales.
Sin indicios de reversión significativa
Monex señala que la desaceleración de la inflación anual de las primeras dos semanas de octubre cambia poco el panorama (8.53% contra 8.64% previo), pues, aunque el proceso de aceleración se ha detenido, aun no hay indicios de una reversión significativa.
Los niveles actuales del avance de los precios siguen siendo bastante elevados y si se materializa un nuevo sobresalto durante los próximos meses, en materia energética por ejemplo, el golpe a las expectativas sería devastador
advierte el grupo financiero.
Por ello, añade que de momento conserva pronósticos de 8.4% y 5.3% para los cierres de los años 2022 y 2023, reconociendo que el sesgo está todavía bastante inclinado hacia el alza.
Monex prevé que la inflación se mantendrá arriba de 8.00% al menos durante los próximos seis meses, por lo que cree que es muy posible que Banco de México siga adoptando una postura de cautela e incrementando la tasa en 75 puntos base.
Paradoja
Paradójicamente, los productos de la canasta alimentaria con la inflación anual más elevada fueron aquellos que mostraron las caídas más pronunciadas de forma quincenal: naranja, papa y cebolla.
Es decir, pese a reducir sus precios por un efecto estacionario en el corto plazo, aún los niveles respecto a hace un año son elevados.
La naranja fue el bien que más pesó en el gasto de las familias del país, pues durante la primera mitad de octubre presentó una inflación anual de 57.81%.
De los 24 productos considerados en el PACIC solamente la manzana bajó su precio anual de 1.90%.
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