La agencia calificadora Moody’s mantuvo la calificación crediticia de México en ‘A3’, así como la perspectiva de ésta en ‘estable’, e indicó que seguirá muy de cerca las políticas públicas de la próxima administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) luego de la cancelación de la construcción del aeropuerto en Texcoco.
Jaime Reusche, analista soberano de México, dijo que en los próximos seis meses estarán atentos al rumbo que tomen las políticas públicas de AMLO, en particular la composición del gasto público, para tomar una decisión sobre la calificación de México.
No obstante, dijo que la decisión de cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) luego de la consulta popular que organizó el equipo del presidente electo, manda una señal negativa a los inversionistas.
“Es una señal negativa para la inversión de largo plazo, que puede desinsentivarla (…) Sí hay bastantes dudas sobre la dirección de las políticas públicas, pero en un futuro cercano no cuestionaremos el grado de inversión de México”, dijo Reusche en una conferencia telefónica.
En medio de esto, contratistas del NAIM, como ICA, se reunieron hoy con AMLO y dijeron que respetarán la decisión del próximo gobierno, con el cual establecerán mesas de trabajo para definir el rumbo de su participación en el sistema aeroportuario que se creará.
“Es positivo, pero quedan muchas interrogantes de la política pública a futuro”, dijo Reusche.
Uno de los primeros pasos de Moody’s será examinar el paquete del Presupuesto de Egresos que entregará el equipo de AMLO el 15 de diciembre, esto para analizar la estructura del gasto público, el cual dará varias señales sobre la sostenibilidad de las finanzas públicas.
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En este sentido, el analista de Moody’s comentó que el próximo gobierno tiene un punto de partida relativamente bueno en términos económicos y fiscales.
“Quisiéramos darnos por lo menos seis meses fuera de que no se genere algún shock mayor. Fuera de eso, el alto nivel de solvencia de las cuentas públicas, la relativa estabilidad de la economía mexicana nos da ese colchón de tiempo para seguir evaluando si es que las políticas públicas van a mantener su curso o vamos a empezar a ver que se utiliza más la consulta popular o hay decisiones erráticas en cuanto al manejo fiscal”.
Bonos, en la mira
Luego de la cancelación del NAIM, Moody’s recortó la calificación de la emisión de bonos para financiar la construcción de éste por 6,000 millones de dólares.
La calificación pasó de ‘Baa1’ a ‘Baa3’, cercano al grado especulativo y existe la posibilidad de recortarla aún más, esto en caso de que los ingresos provenientes de la Tarifa de Uso del Aeropuerto (TUA) que respaldan los bonos, disminuyan por una menor actividad a la calculada con el NAICM.
Adrián Garza, analista de infraestructura de Moody’s, dijo en la conferencia de prensa que, usar el TUA del aeropuerto de Santa Lucía (una vez que esté en operación), seía positivo pero aún no hay una proyección del tráfico de pasajeros que pueda generar.
“Es una posibilidad, pero aún no lo tenemos planeado en un papel y habría la necesidad de sentarse con los bonistas y que lo acepten”, dijo Garza.
El analista comentó que, la calificadora seguirá los planes que se tengan para los bonos y aunque el riesgo de impago que tienen ha aumentado, dijo que la calidad crediticia del Fideicomiso en el que se encuentra, tiene una historia muy sólida.