Brasil, Chile y Colombia tendrán una recuperación económica más rápida que la de México, incluso, mejor a los niveles que reportaron antes de la pandemia del COVID-19, indicó el jefe de investigación para Latinoamérica en Barclays, Marco Oviedo.
En México estamos viendo en el margen, mejor actividad que en el resto de Sudamérica en el contexto de una pandemia relativamente más estable, pero aún quedaría rezagado en cuanto a la velocidad de recuperación que esperamos ver en Brasil, Chile y Colombia
Si bien prevé que la economía mexicana presente un avance del 5% para el cierre de este año, aún se mantendrá por debajo de los niveles prepandemia, pues en 2020 el PIB cayó 8.5%, dijo al participar en el podcast de BIVA.
En Brasil, las recientes acciones de distanciamiento fueron más selectivas y ayudaron a mejorar ciertas actividades, con lo que la expectativa del PIB mejoró de 3.2% a 4.3%, remarcó Oviedo.
Con ello, Brasil estaría rebasando sus niveles prepandemia más rápido que México, mismo caso que en Chile y Colombia, pese a la incertidumbre que se está viviendo. Se supone que en Colombia se recuperará rápido por el sector petrolero
En Argentina, el especialista de Barclays ve un panorama más complicado por el nivel de deuda; mientras que en Perú, las próximas elecciones presidenciales, también generan incertidumbre ante un posible triunfo de Pedro Castillo, quien es considerado de izquierda radical.
Oviedo consideró que los estímulos fiscales en Estados Unidos serán de gran ayuda para México y “quizá pueda sorprender al alza pero primero deben resolverse los problemas internos como las elecciones”.
Elecciones en México
Para el especialista de Barclays conforme se acerque la fecha de las elecciones intermedias en el país, los mercados van a empezar a reaccionar.
“Llama la atención de que exista una probabilidad de que Morena pueda perder la mayoría en el Congreso, lo que implicaría que sea más difícil hacer cambios constitucionales que podrían ser detonadores de volatilidad”.
Si Morena pierde la mayoría, quizá se tenga un ambiente menos sorpresivo en el poder legislativo como se observó con las iniciativas enviadas por el Ejecutivo en el sector energético o las iniciativas para las instituciones financieras y del banco central.
Tener no solo al partido dominante y tener mayor presencia de la oposición quizá ayude a reducir la incertidumbre