Al cierre del primer trimestre del año, el mercado laboral de México mostró signos de estabilidad, ya que la informalidad disminuyó marginalmente y el desempleo continuó por debajo de 3%.
De acuerdo con cifras desestacionalizadas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la tasa de desocupación en México llegó a 2.62% de la población económicamente activa (PEA) en marzo de 2025.
Este nivel, además de ser inferior al resultado previo, significó alargar su racha a 29 meses por debajo del umbral de 3%, que en teoría se interpreta que la economía opera en su nivel de pleno empleo.
La tasa de desocupación en México llegó a 2.62% de la PEA en marzo de 2025, alargando su racha a 29 meses por debajo del umbral de 3%Fotoarte: Natalia Montiel
Informalidad, fortaleza y pendiente del mercado laboral
Por su parte, pese a mostrar una reducción marginal, la informalidad en el país dio señales positivas, lo que manifiesta una mayor fortaleza del mercado laboral.
Así, la tasa de informalidad laboral, que considera a los ocupados laboralmente vulnerables por la naturaleza informal de la unidad económica para la que trabaja o que su vínculo laboral no es reconocido por su fuente de trabajo, se posicionó en 54.43%.
Respecto a marzo de 2024, presentó un retroceso de 0.001 puntos porcentuales, la segunda baja al hilo; sin embargo, preocupan los niveles de este indicador, pues alrededor de 54 de cada 100 ocupados laboran en la informalidad.
Subocupación, al alza
Otra forma de caracterizar a la población ocupada es en función de su condición de subocupación, la cual se entiende como la necesidad y disponibilidad de ofertar más horas de trabajo de lo que su ocupación actual les permite.
De tal manera, la subocupación llegó a 7.23% de la PEA en marzo del año en curso, siendo superior al mes previo (6.84%), y lejos de los mínimos históricos registrados en 2006.
En general, la PEA fue de 61.1 millones de personas de 15 años y más, lo que dio una tasa de participación de 59.3%; dicha cantidad significó una disminución anual de 128,000 personas.
Al distinguir por sexo, la tasa de participación económica de las mujeres fue de 45.6% y la de hombres, de 75%; en cuanto al año anterior, la participación de mujeres bajó 6.6 puntos porcentuales y la de hombres, 0.9.
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