La industria manufacturera, bastión de la economía mexicana, retrocedió al inicio del 2023, manifestando la fragilidad de la demanda externa, principalmente desde Estados Unidos, nuestro principal socio comercial.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el valor de producción manufacturera ascendió a 875,214 millones de pesos en el primer mes del año en curso.
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Este monto significó una caída anual de 0.6% en términos reales, resultando la segunda disminución al hilo.
Fragilidad en la demanda
Para Ve por Más (Bx+), en el corto plazo, la dilución de obstrucciones en cadenas de suministro, aunque cada vez en menor magnitud, junto una economía global más resiliente a lo esperado, soportarán el panorama para la actividad industrial.
Sin embargo, todavía se anticipa que la demanda externa -especialmente desde Estados Unidos- e interna comience a mostrar fragilidad en adelante, en función de la erosión del poder adquisitivo, el apretamiento monetario y un entorno económico más incierto
asegura Bx+.
Así, con base en la pérdida de vigor en exportaciones, consumo e inversión, prevé una desaceleración en la actividad industrial durante el 2023.
Por otro lado, Ve por Más asevera que esta desaceleración se vería contenida bajo el supuesto de que, en los próximos años, México se beneficie del proceso de reagrupamiento de la industria norteamericana.
Lo anterior, en la medida en las empresas buscan cadenas de suministro más resilientes y próximas a los centros de consumo; evitar afectaciones por las disputas sino-americanas, y cumplir con las reglas de origen del T-MEC.
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Continúan riesgos
Por su parte, Monex observa señales que siguen favoreciendo un trimestre de expansión para el PIB a inicios del 2023 y los datos de producción industrial no envían un mensaje distinto.
Aunque se perdió el dinamismo de los meses previos, agrega, los sectores lucen resilientes y probablemente aportarán más que el resto de las actividades al crecimiento de todo el año.
No obstante, siguen habiendo riesgos importantes, sobre todo a través de las tasas de interés que son cada vez más elevadas y ejercen un efecto restrictivo sobre la inversión y por ende, sobre varios de los componentes de la actividad industrial
expone Monex.
Los subsectores
La baja de la producción manufacturera de 0.6% a tasa anual real en el primer mes del 2023 no fue tan pronunciada debido al crecimiento de sus dos principales industrias.
Éstas fueron fabricación de equipo de transporte (3.3%) e industria alimentaria (6.8%), que en conjunto aportan 47.7% del valor total.
Pero los demás subsectores importantes presentaron disminuciones, destacando por mayor valor:
- industria química (6.5%)
- industrias metálicas básicas (16.0%)
- fabricación de productos derivados del petróleo y del carbón (4.2%)
- industria del plástico y del hule (4.0%)
- fabricación de productos metálicos (9.3%)
