Pemex planea arrancar la construcción de una nueva refinería en Dos Bocas, Tabasco, hacia finales de año, en momentos en los que la empresa está en el ojo del huracán por su endeble situación financiera.

Con la construcción de esta refinería, el gobierno federal pretende reducir la importación de combustibles, que corresponde a cerca de 80% del consumo nacional; sin embargo, para la petrolera implica una inversión estimada en 594,800 millones de pesos, que algunos analistas consideran como riesgosa.

La refinería no tiene mucho sentido financiero para Pemex este año, el mercado no acompaña a Pemex como quisiera, esa visión no ha cambiado, es parte de esta idea, la razón por la cual requiere de apoyo soberano

comentó en conferencia telefónica, Jaime Reusche, analista soberano de Moody’s.

La petrolera nacional importó 26,382 millones de dólares en gasolinas y diésel durante 2018, desde los 21,198 millones de dólares de un año antes, según cifras del Sistema de Información Energética.

La construcción de la refinería forma parte del Plan Nacional de Refinación que también considera la rehabilitación de las seis refinerías de Pemex con el fin de que incrementen su capacidad de procesamiento de crudo.

Las refinerías de Tula, Hidalgo; Salamanca, Guanajuato; Cadereyta, Nuevo León; Ciudad Madero, Tamaulipas; Salina Cruz, Oaxaca; y Minatitlán, Veracruz, tienen una capacidad para procesar 507,078 barriles por día, sin embargo, en el mejor de los casos operan al 40% de su capacidad.

En su reporte del cuarto trimestre de 2018 Pemex indicó que, durante los primeros seis meses del año elaborará los documentos que debe entregar para la evaluación y autorización de la refinería y preparará el sitio en el segundo semestre.

En 2018 Pemex produjo 207,109 barriles diarios (bd) de gasolina, 116,806 bd de diésel y 34,653 bd de turbosina, lo que representa una disminución de 19.41%, 23.96% y 14.44%, respectivamente.

Hay una connotación muy importante (en el anuncio), y es que Pemex le va a dar prioridad a los proyectos políticos más que a la salud financiera de la empresa y eso no será bien visto por los inversionistas

dijo Gonzalo Monroy, director general de la consultoría GMEC.

No obstante, el proyecto de Dos Bocas podría retrasarse porque no cuenta con los estudios de impacto ambiental necesarios para su construcción. Incluso Pemex fue multada por 13 millones de pesos por parte de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) como medida compensatoria por haber hecho el desmonte ilegal de vegetación en el manglar en el que construirá la refinería.

La construcción podría no comenzar en diciembre porque Pemex debe cumplir con los requerimientos de ASEA y deberá tener documentos en regla para poder establecer la licitación. Por ahora es una buena propuesta en papel

dijo Ramsés Pech, consultor de Caraiva y Asociados.

Pemex no solo enfrenta la presión de sanear sus finanzas y mantener su calificación crediticia, sino también de acelerar la producción tanto de crudo como de gasolinas y diésel, para reducir las importaciones, que año con año se encarecen.