Durante abril, la inflación en México se aceleró a 6.08% anual, su mayor nivel desde finales de 2017 y muy por encima del rango objetivo de Banco de México (Banxico) que es de 3% +/- un punto porcentual, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para un mismo mes, la inflación es la más alta desde 2009.
La inflación se vio presionada por incrementos en los precios de productos agropecuarios y también obedece a la baja base de comparación de lo que ocurría hace un año.
El dato —el mayor desde diciembre de 2017 cuando fue de 6.77%— quedó por encima del 6.01% estimado por analistas consultados por Citibanamex.
Previo a la publicación del dato, la directora de análisis económico de Banco Base, Gabriela Siller, estimó que la inflación se ubicaría en 6.03% y en lo que resta del año probablemente se observen más presiones inflacionarias.
Tomando en cuenta esta estimación, se puede decir que cerca del 45% del incremento de la inflación anual en lo que va del año se debe a efecto de baja base de comparación y 55% del incremento es resultado de presiones inflacionarias en las primeras quincenas del año,
escribió Siller en un mensaje
“Los recientes incrementos en el precio del maíz y la evidencia de una reactivación económica desde marzo, elevan la probabilidad de que se sigan observando presiones inflacionarias en el año”, agregó Siller.
A finales de marzo, Banxico mantuvo en 4% la tasa de referencia, citando un incremento en las expectativas para la inflación y la próxima semana el banco central publicará su decisión de política monetaria, en la que el mercado no ve un ajuste.
Para Joel Virgen, economista en jefe para México & Colombia de BNP Paribas, el dato de la inflación de abril es la “cima de la joroba” en variaciones anuales.
Es relevante el carry estadístico (comparación anual). Podremos ver que ese carry anual empezará a diluirse a partir de mayo, esto será gradual. No pensemos que las presiones desaparecerán, las presiones no vienen solamente del carry. Por ejemplo, las presiones en energía, agropecuarios y choque en precios relativos ligados a la pandemia,
dijo Virgen en un video
Sólo en abril, los precios crecieron 0.33%, su mayor avance para un mismo mes desde 2009.
Detrás del incremento de los precios, los productos que presentaron una variación mensual mayor fueron el aguacate, con 29.46%; jitomate, 26.09%; tortilla de maíz, 1.83%, y loncherías, fondas, torterías y taquerías, con un alza de 0.80%.
Aquellos que, al contrario, vieron disminuciones en sus precios, respecto al mes previo fueron la papa y otros tubérculos, 18.04%; electricidad, 12.03%; gas doméstico LP, .71%, y servicios turísticos en paquete con una caída de 2.55%.
La inflación subyacente —que excluye los bienes y servicios más volátiles como los agropecuarios, los energéticos y las tarifas del gobierno— se aceleró 0.37%, respecto al mes previo y se ubicó en 4.13% a tasa anual.
Los precios de las mercancías se incrementaron 0.44% y el precio de los servicios aumentó 0.28%.
La inflación no subyacente se aceleró 0.21% y a tasa anual se situó en 12.34%, según datos del Inegi.
Los precios de productos agropecuarios subieron 2.61%, mientras que los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno disminuyeron 1.49%.