La manufactura mexicana demostró en julio de este año que continúa fortalecida pese a las presiones inflacionarias en el país y la fase recesiva de la economía estadounidense en la primera mitad del 2022.
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De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el valor de producción manufacturera ascendió a 882,589 millones de pesos corrientes en el séptimo mes del 2022.
Este monto fue 9.3% superior, en términos reales, al nivel productivo de igual periodo del 2021; esta tasa representó hilar ocho meses con crecimientos superiores a 8%.
Automotriz ’empuja’ manufactura
El principal factor de dinamismo de la industria manufactura fue el sector automotriz, el cual ya manda señales de recuperación tras el impacto por el déficit de semiconductores y la pérdida de poder adquisitivo en el mundo.
La manufactura, que es el motor económico de México, da señales de que la economía estadounidense, principal demandante, se recuperará de su fase recesiva en el inicio de la segunda mitad del año.
De los 25 sectores manufactureros considerados, solamente cinco presentaron caídas en su producción durante julio:
- productos metálicos (0.5%)
- muebles, colchones y persianas (4.2%)
- industrias metálicas básicas (5.7%)
- accesorios, aparatos eléctricos y equipo de generación de energía eléctrica (9.6%)
- fabricación de productos textiles, excepto prendas de vestir (14.8%)
Efectos superados
Sin embargo, la atención se centró en la fabricación de equipo de transporte, que es la industria más importante del territorio nacional con 30.0% del valor total.
La fabricación de equipo de transporte, principalmente automotriz, aumentó 11.9% a tasa anual real, el mayor nivel en 14 meses, situación que expresa que el efecto del déficit de semiconductores quedó superado.
Mientras las industrias que mostraron los mayores incrementos en julio pasado fueron:
- Fabricación de productos derivados del petróleo y del carbón (80.1%)
- Impresión e industrias conexas (24.1%)
- Fabricación de maquinaria y equipo (14.0%)
- Fabricación de productos de hule (12.9%)
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Riesgos latentes
Si bien la manufactura nacional exhibió fortaleza en julio, todavía existen riesgos que puedan mermar su producción.
El mayor riesgo es la situación de Estados Unidos, que es el país que más consume manufacturas mexicanas, cuyo PIB se contrajo 0.6% a tasa anualizada en el segundo trimestre, la segunda baja consecutiva (1.6% en el primer trimestre), dando como resultado una fase recesiva.
Desde un enfoque doméstico, los riesgos son las presiones inflacionarias, el incremento en las tasas de interés y la incertidumbre económica que impactan en el gasto de los hogares y la inversión de las empresas.
