Los estragos derivados por el huracán Otis en Acapulco impactaron a la baja en los precios al consumidor de Guerrero durante noviembre pasado, ocasionando la mayor caída en el estado desde que se tienen registros.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de Guerrero cayó 0.81% a tasa mensual en el onceavo mes del 2023.

Esta disminución, considerada una deflación insólita, se dio tras cinco meses al hilo con alzas; además, representó la contracción más pronunciada desde que comenzó la base estadística del INEGI sobre el INPC a nivel estatal, en agosto del 2018.

El desplome de los precios al consumidor en Guerrero se debe a que Otis colapsó la economía de Acapulco, municipio que representa 65.8% del Producto Interno Bruto (PIB) de la entidad.

Plata productiva, dañada

Los daños por el fenómeno natural categoría 5, según el Consejo de Cámaras Industriales y Empresariales de Guerrero, ascendieron a 90% de la planta productiva estatal.

En tanto, los principales servicios de la población quedaron deteriorados, cuyos cobros quedaron congelados.

Lo anterior se observa en que las mayores caídas mensuales del INPC de Guerrero fueron en electricidad (52.30%), servicios de telefonía fija (45.18%), servicio de telefonía móvil (29.03%) y cuotas de autopistas (27.35%).

Choque inmediato

Joana Chapa, directora de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Nuevo León, dijo la caída en el INPC de Guerrero derivó de un choque entre oferta y demanda.

Por un lado, la destrucción de infraestructura pública y privada provoca una disminución en la oferta de bienes y servicios, lo que causa una carestía relativa y con ello, un aumento en precios. Por otro lado, como se trata de un lugar turístico y debido a que fue una destrucción importante, muchas familias se fueron a otras ciudades, por lo que cayó la demanda de bienes y servicios, lo que baja el nivel de precios

detalló la investigadora.

Añadió que en el agregado se observó que los precios al consumidor se redujeron de manera inmediata, por lo que los efectos de la caída en la demanda fueron mayores a los de la oferta.

Falta de monitoreo

Otra explicación de la disminución del INPC de Guerrero es la falta de un monitoreo real de los precios de bienes y servicios, pues se han reportado genéricos con alzas del triple de su valor.

En esta línea, el INEGI informó que, derivado del impacto del huracán Otis, imputará los precios de aquellos bienes y servicios que no se encuentran disponibles, así como aquellos que aún no tienen un abasto regular.

Dado que la muestra de establecimientos con la que se cotizaba la canasta ya no existe por los efectos del fenómeno natural, en los próximos meses se obtendrá una nueva muestra de establecimientos y productos que formarán parte de la canasta de Acapulco

dijo el instituto.

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