Para el 2022, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador dejará de percibir ingresos tributarios por 879,654 millones de pesos, debido a la aplicación de diferentes estímulos como la tasa cero en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y distintos tratamientos fiscales. 

A esta falta de ingresos, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público decidió denominarlas “renuncias recaudatorias”, anteriormente se llamaban gastos fiscales y representan los recursos que deja de percibir el fisco por las exenciones, deducciones, subsidios, créditos fiscales, condonaciones, estímulos y regímenes especiales.

Lo que dice (el gobierno) es ‘yo dejé de recaudar esto, porque estimo que con ese dinero estoy generando un beneficio hacia la persona que no se lo estoy cobrando’,

dijo en entrevista el abogado fiscal y catedrático de la UNAM, Juvenal Lobato

Los 879,654 millones de pesos equivalen al 3.2% del Producto Interno Bruto (PIB), una cantidad que podría ayudar al gobierno a hacer frente a ciertas presiones de gasto público como el pago de pensiones, costo financiero de la deuda y las participaciones a estados y municipios. 

Renuncia por tasa cero al IVA

De acuerdo con la ILIF 2022, la propuesta de tasa cero en el IVA a productos de higiene femenina y alimentos para mascotas, se estima una pérdida de ingresos por 329,365 millones de pesos, que representa el 1.22% del PIB.

El caso de los productos de gestión menstrual es el ejemplo más claro (…) deja de tener ese ingreso por IVA con el consecuente beneficio a la población que va dirigido

agregó Lobato.

 

De acuerdo con el profesor investigador del Tec de Monterrey, Pablo López Sarabia, desde el punto de vista de la recaudación es poco óptimo el monto de las renuncias, pues se trata de recaudar la mayor cantidad de dinero.

“Un Estado con mayores ingresos, es un Estado fuerte. Le permite cubrir su gasto o apoyar a sectores sociales”, precisó Sarabia.

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Estímulos fiscales representan casi 1% del PIB

Los estímulos fiscales representan una “renuncia” de 260,466 millones de pesos (0.96% del PIB); mientras que los ingresos exentos del Impuesto Sobre la Renta (ISR) por salarios se estima una pérdida recaudatoria por 181,569 millones de pesos (0.67% del PIB).

También se estima una pérdida recaudatoria de 65,538 millones de pesos (0.24% del PIB) por concepto de bienes y servicios exentos del IVA, y el subsidio para el empleo se proyecta una pérdida por 42,716 millones de pesos (0.16% del PIB).

“Al final del día significan que el gobierno deja de recaudar pero los beneficios los aprovecha la población. Considero que es positivo, si no aumenta no hay ningún tipo de estímulo que se esté dando”, dijo Lobato.

¿Puede llegar al billón de pesos?

La cifra de 879,654 millones de pesos puede ser al final un billón de pesos, pues en el documento que por ley se publica —de manera desglosada a más tardar el 30 de junio de cada año— las renuncias fiscales para este año estimadas ascendían a 1.03 billones de pesos y para 2022 ascendía a 1.11 billones de pesos. 

Es decir, el próximo año, Hacienda desglosará los conceptos y la cifra puede modificarse.

Puede cambiar porque están hechas bajo el supuesto de que están viendo el impacto de cada uno de manera aislada, cuando operan en conjunto puede ser mayor a la contemplada,

dijo Sarabia

La proyección de las renuncias recaudatorias solo aproxima la dimensión de la pérdida fiscal y no deben considerarse como un potencial recaudatorio, expuso la Secretaría de Hacienda.