Las ganancias del sector industrial en China cayeron 1.9% interanual en diciembre a 680,800 millones de yuanes (100,900 millones de dólares), un mes después de que publicara su primera contracción en casi tres años, de acuerdo con datos de la Oficina Nacional de Estadística de China.
La contracción de ganancias por segundo mes consecutivo presiona a los responsables políticos que apoyan a las industrias perjudicadas por la desaceleración de los precios y la débil actividad de las fábricas en medio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Para todo 2018, las ganancias industriales aumentaron 10.3% anual, a 6,640 millones de yuanes, un ritmo de avance mucho menor respecto al crecimiento de 21% registrado en 2017.
Los datos apuntan a más problemas del sector manufacturero chino que ya lucha con una disminución de pedidos, despidos y cierres de fábricas dada la desaceleración de la economía china.
La economía China se expandió 6.6% en 2018, el menor avance en casi 30 años, y el crecimiento se desacelerará aún más en 2019, ya que los esfuerzos de Beijing para reducir los riesgos de la deuda deprimen el mercado inmobiliario y frenan los flujos de crédito al sector privado, mientras que la represión de la contaminación frena la actividad industrial.
“En lo que respecta a la tendencia futura, es bastante obvio que continuará disminuyendo porque el (índice de precios al productor) aparentemente se volvió negativo el mes pasado, y cuando este se vuelve negativo, los beneficios de las empresas industriales disminuyen”, explicó el economista de Bank of Communications en Shanghai, Tang Jianwei.
Panorama poco alentador
Los sectores que ascendieron, como la extracción de petróleo, minería de carbón y metal, fueron en 2018 los responsables de la mayor parte de las ganancias, sin embargo, los analistas dicen que a medida que los precios industriales se desaceleran, la rentabilidad de estos se verá presionada.
El índice de desarrollo de las pequeñas y medianas empresas se ubicó en 93 el último trimestre, por debajo de la marca de 100 que separa el crecimiento de la contracción, según la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.
La calificadora estadounidense Moody’s explicó a través de un informe reciente que las últimas medidas del gobierno chino para apoyar la financiación de firmas privadas tendrían un efecto limitado, ya que el crédito se canalizaría principalmente hacia las pocas empresas privadas más sólidas.
Demanda plana
Aunque los comerciantes están llenando el inventario antes de las vacaciones del Año Nuevo Lunar a principios de febrero, la demanda sigue siendo débil.
Agravando la desaceleración, el gobierno también ha prometido que no renunciará a hacer cumplir los controles contra la contaminación, negándose a aceptar la creciente presión económica como excusa, lo cual aumenta la incertidumbre sobre el impulso general al sector industrial.
Las ganancias en las empresas industriales estatales de China aumentaron 12.6% en 2018 respecto al año anterior, desacelerándose de un aumento del 16.1% en el periodo enero-noviembre.