Este miércoles, Fitch Ratings ratificó la calificación crediticia para la deuda soberana de México en BBB- con perspectiva estable, destacando que las finanzas públicas de México continúan mostrando un mejor desempeño que economías similares, registrando una relación deuda pública/PIB muy por debajo de la mediana de países con la misma calificación.

En un comunicado, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) destacó que la ratificación ayuda a preservar el acceso favorable para el sector público y privado a los mercados financieros internacionales y nacionales.

La dependencia detalló que la agencia calificadora destacó que los ingresos tributarios se han fortalecido, resaltando la recaudación del IVA, dada la sólida recuperación económica presentada en el país.

De forma similar, el informe resalta el manejo proactivo de la deuda por parte del gobierno federal, lo que ha permitido mejorar el perfil de vencimientos de la deuda con un alto porcentaje de denominación en moneda local, reduciendo el impacto de riesgos externos. 

Fitch indicó que el paquete económico 2022 no vislumbra aumentos en impuestos, puesto que existen medidas para incentivar a los pequeños contribuyentes para su incorporación a la formalidad, lo que incrementará la base tributaria. 

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Sin embargo, la nota de Fitch también señala que el limitado impulso fiscal probablemente resultará en mayores costos sociales (como un incremento en los índices de pobreza y subempleo), lo que incrementa el riesgo de cicatrices económicas y afecta el potencial de crecimiento futuro.

“Los bajos ingresos del gobierno, junto con el rápido aumento de los costos de las pensiones, indican una reducción del espacio fiscal a mediano plazo”, señaló la calificadora y añadió que “colchones fiscales” como el Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios pese a no estarán disponibles para compensar las pérdidas materiales de ingresos.

La firma señaló que espera un crecimiento del PIB real de 5.9% en 2021 y de 2.8% en 2022, agregando que la recuperación económica avanza aunque a diversas velocidades y con señales de fragilidad, en las que las manufacturas (exceptuando las de autos) han vuelto a niveles prepandemia ayudados por la reactivación en Estados Unidos, mientras que los servicios y la construcción están rezagados.

El informe destaca el avance en la vacunación para mitigar los riesgos asociados con la pandemia en el proceso de reactivación, aunque considera que el crecimiento a mediano plazo rondará el 2%, afectado principalmente por la incertidumbre en la inversiones por “ruido político, calidad de gobierno y bajo crecimiento de la productividad.