El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) indicó que el principal riesgo de las finanzas públicas del país es su solidez y el peligro de insostenibilidad ante los ingresos frágiles y el gasto inercial elevado, lo que deja poco margen de endeudamiento público.
De acuerdo con el organismo asesor del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la prioridad debe ser la reactivación sólida y sostenible de la economía con base en inversión productiva, tanto pública como privada.
Hacia adelante hay fuertes necesidades de inversión en infraestructura y capitalización de las empresas del Estado, así como cargas fuertes en gastos ineludibles como pensiones y servicio de la deuda pública
puntualizó el CEESP.
Si bien en su “Análisis Económico Ejecutivo” de esta semana los especialistas reconocieron que recientemente diversos indicadores como el del Producto interno Bruto (PIB) han mostrado indicios de recuperación, le tomó ocho trimestres alcanzar el nivel previo a la pandemia, mientras otras economías lo hicieron en tres.
El organismo privado encabezado por Carlos Hurtado resaltó que el consumo se ha reactivado más, mientras que la inversión está ligeramente por debajo del nivel registrado durante 2018.
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Creación de empleo
Para el CEESP, la suficiente creación de empleos productivos y oportunidades de emprendimiento, así como el crecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) es necesaria para tener una mejor población en todos los ámbitos.
El empleo formal, con base al número de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), creció en 854,000 al término de mayo; sin embargo, la población con edad para trabajar lo hizo en 7.1 millones.
Durante el mismo lapso del sexenio pasado, la afiliación al IMSS había registrado un aumento de 3 millones.
En lo que va del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), la productividad laboral ha registrado una caída que alcanza casi el 11%.
Hay evidencia amplia de la relación entre baja productividad e informalidad –entre otros factores como falta de inversión en capital o competencia económica-. Hay que atacar la informalidad desde sus causas. Ciertamente la tolerancia de la autoridad la facilita, pero la incapacidad del sistema de crear puestos de trabajo formales -debido a los costos de hacerlo- la alimenta
dictaminó el análisis del CEESP.
