JPMorgan espera una contracción más profunda del Producto Interno Bruto (PIB) de México para este año, de 8.6%, en vez del 8.4% calculado previamente, y considera que la respuesta del gobierno ante la pandemia ha sido deslucida.
La respuesta del gobierno a la emergencia nacional ha sido deslucida (…). Con el distanciamiento entre las empresas y el gobierno que aparentemente se está ampliando, en parte debido a la falta de apoyo fiscal a los primeros, el escenario de disrupciones duraderas en la economía es fuerte,
indica la institución financiera en un reporte.
JPMorgan señaló que los datos del Inegi sobre la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo sugieren que la tasa de desempleo posiblemente superó el 20% en abril.
Ante la crisis, el banco consideró que el impacto del COVID-19 tendrá “consecuencias profundas y probalemente duraderas”, pues la inversión y el consumo se han visto mermados.
La lectura de indicadores económicos es clave. El Índice de Gestores de Compra (PMI) manufacturero de mayo se ubicó en 39.2, es decir, en terreno negativo, mientras el PMI de servicios bajó a 35.6 unidades.
Con la reanudación gradual de la economía, el sector servicios se verá afectado principalmente por los daños en el mercado laboral y cambios en los hábitos de los consumidores.
Otro de los indicadores relevantes será la publicación de la producción industrial de abril, del cual JPMorgan estima una caída de 14.5%.
No obstante, para junio se prevé un ligero repunte, luego de la reanudación de la industria automotriz, cuyo “sector está estancado” y los datos de mayo lo confirmaron con un descenso de 93.68% en la producción y de 95.6% en las exportaciones.
Para 2021, el PIB crecerá 2.5%, según el banco.
Asimismo, prevén que Banco de México continúe disminuyendo su tasa de referencia, que actualmente es de 5.50%, y terminar el año en 3%.
Las acciones paralelas del Banco para fortalecer la liquidez en el sistema financiero han sido bien recibidas y mientras los mercados financieros se comporten bien, no esperamos que Banxico realice compras directas de valores gubernamentales,
subrayó el banco.
Respecto a la política fiscal, destacó la ausencia de estímulos significativos.
“Durante la pandemia y la austeridad fiscal mal concebida para proteger los proyectos favoritos del gobierno podría resultar en una contracción más profunda y probablemente no estabilizará la dinámica de la deuda”, concluyó JPMorgan.