El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos se contrajo 31.4% a tasa real ajustada anual en el segundo trimestre, con lo que confirma la contracción más profunda desde 1947, año en que inician los registros oficiales.
La caída del PIB estadounidense fue algo menor a la estimación de agosto, gracias a un consumo mayor al inicialmente anunciado en ese mes, según la medición final del Departamento de Comercio divulgada este miércoles.
El dato es ligeramente mejor a lo esperado por los analistas, que pronosticaban una contracción de 31.7%.
Con esta contracción la mayor economía del mundo acumuló dos trimestres en terreno negativo, luego de la caída de 5% en el primer trimestre y que se profundizó por la pandemia de COVID-19, que obligó a tomar drásticas medidas de confinamiento.
La medida utilizada en Estados Unidos para estimar el crecimiento es la variación anualizada, que compara el PIB con el del trimestre anterior y proyecta la variación a todo el año. Ello se diferencia de la variación interanual, que solo compara el PIB con el mismo periodo del año anterior.
“La revisión al alza (en 0.3 puntos porcentuales de la caída del PIB del segundo trimestre) refleja principalmente una revisión hacia arriba del consumo, que se vio parcialmente compensada por revisiones a la baja en las exportaciones y la inversión fija no residencial”, comentó el Departamento de Comercio en un comunicado.
La semana pasada, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que las perspectivas para la economía mundial eran menos sombrías, con contracciones menos severas de lo esperado en los países avanzados.
Hasta junio, el FMI estimó que el PIB de las economías avanzadas tendría una contracción de 8.0% y una expansión de 4.8% en 2021. El 13 de octubre, el organismo publicará sus nuevas perspectivas sobre las economías.
Para 2020, el organismo que dirige Kristalina Georgieva prevé que el PIB de Estados Unidos descienda 8.0% y que crezca 4.5% en 2021.
Con información de AFP