El Fondo Monetario Internacional (FMI), dio a conocer que dos tercios de los principales economistas del sector público y privado consideran que este 2023 se registrará una recesión a nivel mundial.
Al tiempo que líderes empresariales y gubernamentales se reunían en Davos, Suiza, para su encuentro anual, la organización internacional detalló que un 18% de los encuestados ven una recesión mundial como algo “extremadamente probable”, esto significa más del doble de lo reflejado en la encuestas anterior, realizada en septiembre de 2022.
Recession in 2023? That depends on where you are in the world #GlobalEconomy #Inflation #wef23 @aenguscollinshttps://t.co/WXgSbBSsYz
— World Economic Forum (@wef) January 16, 2023
De acuerdo con el FMI, sólo un tercio de los especialistas consultados piensan que una recepción mundial para este año es “poco probable”.
El entorno actual de alta inflación, bajo crecimiento, alta deuda y alta fragmentación reduce los incentivos para las inversiones necesaria para volver al crecimiento y elevar los niveles de vida de los más vulnerables del mundo
indicó en un comunicado Saadi Zahidi, directora gerente del FMI.
Los resultados de la consulta se encuentran en línea con los pronósticos de crecimiento compartidos por el Banco Mundial (BM) para este año, los cuales se encuentran cercanos a la recesión para muchos países.
Las principales razones son los incrementos a las tasas de interés por parte de los bancos centrales, el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania y las fallas por parte de las economías más fuertes del mundo.
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Inflación y tasas de interés
Respecto a la inflación, la encuesta del WEF reveló variaciones importantes para cada región, mientras que para China la ubican en un 5%, para Europa alcanzaría el 57%, debido principalmente al incremento a los precios de la energía el año pasado, situación que ha arrastrado hasta el arranque de este año para la economía general.
Asimismo, los economistas esperan que para este año, tanto Europa como Estados Unidos endurezcan su política monetaria en un 59% y 55%, respectivamente, con los riesgos que puede llevar hacerlo o no.
Si bien algunos economistas consideran que una desaceleración global podría afectar la inversión en ciertas áreas como la salud y la educación, situación que afectaría a la pobreza y al clima, también la ven como una posibilidad para que los bancos centrales pongan un freno al incremento de las tasas.
Quiero que la perspectiva se debilite un poco para que las tasas de la Reserva Federal comiencen a bajar y se alivie toda la absorción de liquidez por parte de los bancos centrales mundiales
apuntó Sumant Sinha, presidente y director ejecutivo de ReNew Power.
Aunque algunos especialistas consideran que las personas con ingresos altos podrían librarse de los peores efectos de la recesión debido a los altos niveles de inflación, los grupos de ingresos medios y bajos se verían afectados de manera importante.
Los nuevos desafíos para este año golpearán a las empresas multinacionales, lo que las llevará a reducir costos, desde el tema operativo hasta el despido de trabajadores, el cual ya inició desde fines del año pasado.
En contraste a lo que venía sucediendo en los últimos años a causa de la pandemia de COVID-19, los especialistas no ven a las interrupciones en la cadena de suministro como un lastre significativo para la actividad comercial de 2023.
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Con información de Reuters
