La deuda pública española se situó en el segundo trimestre en el 110.1% de su Producto Interior Bruto (PIB), un récord en su historia reciente debido al enorme gasto público provocado por la pandemia del COVID-19, informó este miércoles el banco central.
La deuda, que en valores absolutos alcanza los 1.29 billones de euros (1.5 billones de dólares), es la más elevada desde 1995, según el recuento histórico disponible en la web del Banco de España.
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El diario económico especializado Cinco Días asegura que se trata del valor porcentual más elevado del país en más de un siglo, desde 1902.
Desde mayo, el gobierno español había reconocido que la gestión de la pandemia tendría un efecto devastador en sus cuentas públicas, atenazadas por la caída de los ingresos debido a la crisis económica causada por el confinamiento y un fuerte incremento del gasto.
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El ejecutivo, liderado por el socialista Pedro Sánchez, calcula un incremento de la deuda pública de hasta el 115.5% del PIB a finales de año y un cierre del ejercicio con un déficit del 10.3% del PIB, el más elevado desde 2012, en plena crisis financiera.
El déficit presupuestario ya se ubicaba en el 6.46% del PIB a fines de junio, según una nueva estimación publicada el miércoles por el Ministerio de Hacienda.
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Planes de desempleo
El gobierno de izquierdas de Sánchez ha financiado los planes de desempleo parcial de millones de trabajadores y puso en marcha medidas de ayuda a las empresas mientras la economía se resentía del estricto confinamiento impuesto a mediados de marzo.
Solo los planes de desempleo parcial, recientemente extendidos hasta finales de enero, costaron 4,000 millones de euros (4,680 millones de dólares) al mes desde su activación en abril, explicó Sánchez.
A principios de julio, el jefe de gobierno anunció que preveía aumentar los impuestos para financiar este incremento de los gastos.
España, uno de los países europeos más impactados por la pandemia, será también de los principales beneficiarios del plan de reimpulso europeo, con 140,000 millones de euros (164,000 millones de dólares), la mitad de ellos en préstamos y la otra en subvenciones.