El optimismo en los pronósticos sobre el PIB de México tuvo una nueva revisión de la Cepal, que prevé un rebote de 5.8% este año aún sin alcanzar los niveles prepandemia.

 Previamente, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estimaba un crecimiento de 3.8%.

Hacia el 2022, la economía mexicana estaría creciendo 3.2%, fenómeno que se observará en la región y al que la titular de la Cepal, Alicia Bárcena atribuyó que el rebote no asegura un crecimiento sostenido.

Estamos ante un rebote económico que no asegura un crecimiento sostenido. Hay un riesgo de retorno a trayectorias mediocres, con insuficiente inversión y empleo y mayor deterioro ambiental

dijo Bárcena.

 La desaceleración en México tras el rebote es menor debido al alcance del T-MEC, pero persiste el “esquema de baja tecnología”, dijo la secretaria ejecutiva de la Cepal.

Bárcena planteó que estos pronósticos se dan en un momento de gran incertidumbre debido a los impactos sociales que se agudizan y se prolongan en medio de la reactivación y al tiempo que la pandemia empeora en un estado ambiental difícil de revertir. 

Toda la región tendrá un crecimiento de 5.2% este año y el siguiente 2.9%. 

En el caso de México, el organismo estima que el valor de las exportaciones crezca 11% y el de las importaciones 19%, este último por su vínculo con la industria manufacturera estadounidense.

Las remesas destacan entre los factores que dan dinamismo a la economía mexicana en el proceso de recuperación, según el informe titulado “La paradoja de la recuperación en América Latina y el Caribe”.

 “México recibió 40,600 millones de dólares en remesas, monto que equivale al 3.8% del PIB en 2020, con un crecimiento del 11.4% en dólares respecto al año previo. Esas remesas representaron el 9.7% de las exportaciones totales y su monto fue equivalente a 1.5 veces la inversión extranjera directa recibida”, precisó la Cepal.