La mayoría de los integrantes de la junta de gobierno de Banco de México (Banxico) mandó señales sobre la continuidad de relajamiento en el manejo de la tasa de referencia, a pesar de que hasta marzo la inflación se ubicó fuera de su rango objetivo.
Esta pausa en el ciclo de relajamiento no significa que este haya terminado y que hacia delante estarán atentos por si se presentan las condiciones necesarias para continuarlo,
dijo la mayoría de los miembros del banco central
Los integrantes de Banxico argumentaron que si bien la política monetaria puede contribuir a la recuperación de la economía, debe hacerlo sin poner en riesgo la estabilidad de precios.
La publicación de la minuta -correspondiente a su decisión del 25 de marzo- ocurrió pocas horas después de que conoció el dato de inflación de marzo: 4.67% anual, fuera del rango objetivo de 3% +/- un punto porcentual de Banxico y el mayor nivel desde diciembre de 2018.
“Todos resaltaron que la conducción de la política monetaria enfrenta retos asociados, principalmente, con la evolución reciente de los mercados financieros y destacaron la importancia de un enfoque prudente y cauteloso”, indica la minuta de la reunión en la que por decisión unánime dejaron la tasa de referencia en 4%.
Hacia los próximos meses, la conducción de la política monetaria dependerá de la evolución de los factores que inciden en la inflación, en sus trayectorias previstas en el horizonte de pronóstico y en sus expectativas.
Bajo el panorama de la aceleración de la inflación, analistas consultados por Citibanamex señalaron que Banxico ya no hará recortes a su tasa de referencia en lo que resta del año, mientras que al cierre de año prevén el nivel de la inflación en 4.10%, fuera del rango meta del banco central.
