Los productores y comerciantes de aguacate en Michoacán comenzaron a contratar seguridad privada para proteger a los transportistas de este producto, llamado también “oro verde”, pues son objeto de la delincuencia organizada.

 “Ha habido momentos en que ha habido un aumento en la violencia, y luego no podemos operar al 100% de su capacidad porque queremos evitar la situación y mantener a nuestros empleados seguros”, dijo el portavoz de Villita Aguacates, Aaron Acosta, según un reporte de Quartz.

Aunque Acosta afirmó que la violencia que sucede no es por los aguacates, sino que se da en el marco de la situación de inseguridad que viven Michoacán y otros estados. 

La violencia que está ocurriendo es inherente a esos estados. No es inherente a los aguacates. Esta violencia podría, y probablemente sucedería, con cualquier negocio rentable: no se trata del producto en sí, sino del dinero que los aguacates pueden ganar,

explica en un artículo en el medio especializado Fresh Plaza.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, la producción de aguacate en Michoacán ascendió a un millón 280,735 toneladas en septiembre, 4.8% más que en el mismo mes del año anterior. Ese estado tiene una participación de 78.2% en la producción a nivel nacional.

La contratación de seguridad privada también responde a la inseguridad que viven los certificadores del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), los cuales revisan diariamente las condiciones donde se produce el fruto para facilitar su ingreso a suelo estadounidense. 

En agosto, un grupo certificadores fue detenido y asaltado en el municipio de Ziracuaretiro. Como respuesta, el USDA amenazó con suspender las verificaciones de aguacate mexicano, lo cual impediría su exportación y afectaría gravemente la economía de la región.