La Asociación de Bancos de México (AMB) sumó 8.3 millones de afiliados hasta el 15 de mayo que han solicitado apoyo a los bancos a través del programa para el diferimiento de intereses y capital.

Esto quiere decir que uno de cada cuatro créditos otorgados por la banca previo a la pandemia de COVID-19 se han integrado al programa. 

El presidente de la ABM y de Banco Azteca, Luis Niño de Rivera, detalló en una videoconferencia que 3.3 millones de los créditos corresponden a mipymes; 2.8 tarjetas de crédito; 1.8 millones a crédito no revolvente y 301,000 a hipotecas, que representan 709,000 millones de pesos.

“Estamos apoyando a las personas más necesitadas y a las empresas más pequeñas que hay en el país”, mencionó Niño de Rivera.

En total, el monto que los bancos han dejado de cobrar por el concepto de intereses ordinarios asciende a 50,000 millones de pesos, precisó el presidente de los banqueros.

El programa que se implementó en marzo y consiste en el diferimiento parcial o total de pagos hasta por cuatro meses, con la posibilidad de extenderlo dos meses, puede ampliarse debido a la prolongación de la suspensión de actividades derivadas de la pandemia de COVID-19.

Tenemos que ir evaluando a cada uno de los acreditados que escogió cuatro o seis meses, cuál es su actividad o su ingreso y el tiempo que necesitan para retomar los pagos. Nos estamos preparando dialogando con los clientes y evaluando con reguladores cuáles son los caminos para que requieran una reestructura de pagos diferentes a la contratada inicialmente

señaló Niño de Rivera

El organismo prevé que el índice de morosidad incremente en los próximos meses tras registrar un incremento de dos puntos porcentuales en abril, a 2.3%, respecto al cierre de 2019, situación que refleja a personas dudosas por afiliarse al programa de diferimiento, explicó Niño de Rivera.

Crecen transacciones vía remota durante la pandemia

Durante el confinamiento por la pandemia, las transacciones vía remota crecieron en trece puntos porcentuales en un lapso de dos meses, de 25% en marzo a 38% en mayo.

La transaccionalidad con tarjetas presentes descendió en 13 puntos porcentuales, de 75% a 62% en el mismo periodo, debido al cierre de establecimientos por la Jornada Nacional de Sana Distancia implementada por el gobierno federal.

En tanto, el número de usuarios que descargaron la plataforma de Cobro Digital (CoDi) ascendió a 3 millones hasta el 14 de junio, dijo Niño de Rivera.

Esto representa un incremento de 1.4 millones de cuentas habilitadas desde diciembre. La operatividad de la plataforma lanzada el año pasado acumuló 466 millones de pesos, con 469,000 operaciones, lo que representa un monto promedio por operación de 866 pesos.

Incertidumbre por la inversión

El posible incumplimiento de pagos en los siguientes meses será provocado por la gradual reactivación de las actividades y la falta de inversión en el país, considera Niño de Rivera.

“Nosotros no hacemos proyecciones económicas, pero utilizamos las que hay en el mercado, la mayoría coincide en una contracción del PIB entre 6.5% y 10%. Va a ser un cierre de año difícil, no se puede esperar que una economía cerrada durante cuatro meses se active de manera acelerada”, dijo.

Además advirtió que no se han implementado las reglas para la inversión en infraestructura por parte del gobierno federal, situación que aleja el atractivo por invertir en el país.

El martes, México salió del top 25 entre los países más atractivos para invertir, según el ranking de la firma de consultoría Kearney, debido a la priorización de inversiones como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el Aeropuerto de Santa Lucía, así como la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y el freno de la construcción de la planta de Constellation Brand en Mexicali, Baja California.

Niño de Rivera dijo que México debe apresurarse a reabrir su economía antes de la entrada en vigor del Tratado Entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para integrarse a la cadena de valor y retomar las exportaciones.