De regreso a casa
Se puede decir que José Antonio Murillo es uno de esos genios de bajo perfil.
En 2013, luego de una fructífera trayectoria en organismos financieros internacionales y ocupar la dirección de Análisis sobre Precios, Economía Regional e Información del Banco de México, se sumó al Grupo Financiero Banorte, primero, como asesor del Consejo de Administración.
Pero la verdadera intención del fichaje era buscar la manera de que el banco mejorara sus servicios al cliente y aprovechara de mejor manera los millones de datos que generaba y de los que, hasta ese entonces, se desconocía el gran beneficio de analizarlos.
Así, José Antonio Murillo, licenciado en Economía por el ITAM y doctor en Economía por Rice University, creó y dirigió la Unidad de Negocios de Análisis de Banorte, ayudando a crear más de 1,800 millones de dólares de ganancias en los tres primeros años de operación de la unidad de analítica.
Este hito contribuyó a que fuera reconocido como uno de los mejores analistas y profesionales de datos de Norteamérica, y que su caso fuera publicado en la prestigiosa Harvard Business Review.
Luego de más de siete años en Banorte, diferencias al interior de la administración inexplicablemente provocaron su salida.
Meses más tarde reapareció, incluso hasta de mejor semblante, como CEO de RappiCard México, plataforma de origen colombiano que precisamente había firmado un acuerdo para crear a partes iguales, una sociedad de servicios financieros digitales, la misma que ahora se contrapone con Bineo, el banco digital recientemente autorizado por la CNBV, y que como aquí adelantamos ya inició operaciones limitadas bajo el concepto “Friends and family”, y en el primer trimestre de 2023 arranca operaciones comerciales.
La novedad es que José Antonio Murillo regresará a Banorte, pero ahora en una posición de mayor jerarquía, responsabilidad y prestaciones al mando de Bineo para conjugar su experiencia y conocimiento en la nueva apuesta digital de Banorte.
José Francisco Martha, director general de Desarrollo de Negocios Digitales, quien tuvo a su cargo todo el diseño conceptual y operativo de Bineo, era el candidato natural para encabezar el banco digital, pero prefirió delegar la responsabilidad y seguir con los planes digitales de la institución tradicional que nos adelantan serán muchos, para dejar que Bineo tome su propia identidad y concepto.
¿Y Banamex?
La venta de Banamex tardaría un poco más de lo planeado porque al parecer las expectativas de Citi son demasiado altas para un banco que en los últimos años ha perdido participación de mercado y que ahora trata de subsanar con sendas campañas de publicidad para su negocio de tarjetas de crédito y Afore, principalmente.
Y si bien los dos tiradores que sobreviven, Germán Larrea y Daniel Becker, están en la disposición de ofrecer su mejor precio, no alcanzarían a cumplir el mínimo estimado de 10,000 millones de dólares, por lo que el camino sería irremediablemente una oferta de acciones en la BMV, una opción que siempre estuvo en la mesa y que de aprobarse tardaría varios meses en concretarse.
