Para las fibras hoteleras lo que fue el año pasado y lo que va de 2021 han sido meses complejos debido a la reducción en ingresos y ocupación, sin embargo mantienen sus planes de expansión. Es el caso de Fibra Inn, que planea añadir en el corto plazo unos 676 nuevos cuartos a su portafolio.
La fibra participa con inversión en tres desarrollos que forman parte de su plan de expansión, el cual no se detuvo a pesar del cierre de otros inmuebles operativos a causa de las restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19.
Hasta el cierre del primer trimestre mantienen 33 hoteles operando y cinco cerrados, incluido el Fairfield Inn & Suites by Marriott Coatzacoalcos, que cerró de manera definitiva y el hotel Holiday Inn Coyoacán que sufrió daños en 2017 tras el sismo y empeoró con el de junio de 2020.
Pese a esto, a principios de mayo anunciaron el inicio de operaciones del JW Marriott Monterrey, el cual consideran es uno de los “hoteles con la categoría más alta en la zona metropolitana de Monterrey, Nuevo León y se convierte en una las propiedades hoteleras más emblemáticas”, en conjunto con The Westin Monterrey Valle.
El proyecto requirió 1,374 millones de pesos, aportados por la fibra en coinversión con un inversionista institucional a través de su modelo Fábrica de Hoteles.
Este inmueble cuenta con 250 habitaciones y suites y se ubica dentro del desarrollo de usos mixtos de Parque Arboleda en San Pedro de los Pinos y es la quinta propiedad de la marca en el país y será administrada por Grupo Hotelero Prisma.
“Tenemos la firme confianza que, aún y cuando existe el impacto de la pandemia, seguimos la estrategia adecuada en Fibra Inn para enfocarnos hacia el segmento de hoteles de lujo”, comentó Óscar Calvillo, director general, en un comunicado.
La expectativa es que la operación de la propiedad se estabilice en los próximos 18 a 24 meses con una tarifa promedio de 230 a 255 dólares este año. El segmento de servicio selecto es uno de los que mejor se han recuperado y además representa el 53.9% de los ingresos por servicios hoteleros.
En el resto de las propiedades, aunque se ha visto recuperación, aún está por debajo de los niveles pre pandemia.
Las expectativas son alcanzar el 45% de ocupación para el tercer trimestre del año principalmente motivada por el avance de la vacunación en Estados Unidos que es el origen del 35% de sus huéspedes.
En febrero de 2021 alcanzaron una ocupación de 28.3%, lo que ya consideran una ventaja al posicionarse por encima del 25% requerido para el equilibrio operativo y desde entonces se ha mantenido una recuperación que esperan seguir observando en los próximos meses. En marzo cerró en 35%.
Para el primer periodo del año percibieron 186 millones de pesos, una reducción de 46.7% en comparación el mismo trimestre del 2020.
