Entre la población mexicana, el tener un documento que avale la propiedad de un inmueble es visto como un requisito innecesario, dejando como resultado una brecha relevante en términos de la escrituración de las viviendas.

En la Ciudad de México, de las personas que son propietarias, solo 44% tiene escrituras de dicho bien inmueble, mientras que 46% no tiene y en el caso del 10% restante las escrituras están a nombre de otra persona.

Esto pese a que la escrituración es, después de los testamentos, la actividad más identificada entre la actividad notarial, según indica la Encuesta sobre servicios notariales en la Ciudad de México 2020 presentada en febrero de este año.

Y en vez de que, con el tiempo, la obtención de estos documentos se haga más frecuente, el porcentaje ha disminuido.

En 2017, fecha de la última encuesta realizada, las propiedades escrituradas ascendían al 49% .

El principal motivo de no generar escrituras de la propiedad es el costo: 26% de los encuestados considera que es muy caro, mientras que 25% opina que no es necesario y 21% piensa que es un proceso difícil. 

Esta situación se repite también a nivel nacional. De acuerdo con cifras de la Encuesta Intercensal 2015, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, a nivel nacional de las viviendas particulares habitadas que suman 21.6 millones, 12.49% no tiene escrituras.

Las propiedades que sí están escrituradas 66% están a nombre del residente, mientras que el 17.06% están a nombre de un tercero que no es residente de ese hogar.