BlackRock, considerada la mayor empresa de gestión de activos del mundo, está interesada en invertir en el Tren Maya, una obra insignia del plan de infraestructura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Nos va a apoyar porque se está viendo a México como un país para la inversión. Ellos (BlackRock) está invirtiendo en Pemex y tienen también interés en invertir en el Tren Maya, en algún tramo”, dijo el titular del Ejecutivo durante su conferencia mañanera de este lunes.
López Obrador se reunió el jueves de la semana pasada con Larry Fink, presidente de BlackRock. El mandatario dijo que el CEO de la firma le expresó su confianza en México y agradeció su decisión de invertir en el país.
Hoy conversé con Larry Fink, presidente del fondo BlackRock, uno de los grupos financieros más importantes del mundo. Me expresó su confianza en México y agradecí su decisión de invertir en nuestro país. pic.twitter.com/cVTywyqoby
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) March 6, 2020
La obra, valuada en alrededor de 6,300 millones de dólares, será construida sobre parte de una vía ya existente y recorrerá unos 1,500 kilómetros desde la zona arqueológica de Palenque, en Chiapas, hasta la turística Cancún, en la Península de Yucatán.
A finales de febrero, 71 empresas interesadas la convocatoria de licitación se reunieron para aclarar las dudas sobre el proyecto, como el derecho de vía, los plazos de entrega y la acreditación del contenido nacional tanto en materiales como en mano de obra.
BlackRock mostró su interés por participar en los proyectos de infraestructura con la administración actual desde mayo de 2019.
La firma dio a conocer a principios de este año que modificará su estrategia de inversión y apostará a la inversión sostenible ante la crisis climática, tras ser objetivo de críticas de activistas y empresarios que señalaron su falta de compromiso por reducir su huella de carbono.
No obstante, se prevé que el proyecto del Tren Maya tendrá afectaciones ambientales en diversas zonas que abarcan los estados de Campeche, Chiapas y Quintana Roo, además de sitios arqueológicos y comunidades indígenas.
Desde que llegó a México impulsada por la administración del otrora presidente Enrique Peña Nieto, BlackRock se manejó bajo un modelo de negocio agresivo que les permitió concretar negocios con las élites políticas y empresariales en el país, a través de una red de corrupción y conflictos de interés, de acuerdo con una investigación de BlackRock Transparency Project.
Con información de Reuters