En el año, el tipo de cambio ya acumula una depreciación de 14% y la noticia no debería ser tan mala para la próxima presidenta Claudia Sheinbaum porque supondría la generación de remanentes en el Banco de México por la actualización de las reservas internacionales que se encuentran en niveles histórico de más de 226,000 millones de dólares, y que Andrés Manuel López Obrador no pudo recibir porque el tipo de cambio se fortaleció en la mayor parte de su mandato. Sólo el año pasado se apreció más de 13%, el mejor registro para la moneda mexicana por lo menos desde 1989.

En un cálculo preliminar y conservador, el siguiente gobierno podría contabilizar cerca de 500,000 millones de pesos de remanentes, que serían como un respiro ante las finanzas públicas acotadas que recibirá el equipo hacendario de Sheinbaum encabezado por Rogelio Ramírez de la O, quien por cierto en los últimos días fue el centro de versiones de que finalmente no seguiría al frente de la Secretaria de Hacienda y se estaría buscando el relevo para un puesto crucial para el próximo gobierno.

Sin embargo, también Sheinbaum se quedará con las ganas de recibir una millonaria suma de dinero de la que 70% se debe usar para disminuir la deuda pública, y el resto para sumarse a los fondos destinados para la estabilización financiera del país, porque si bien se generarían remanentes este año de continuar la depreciación cambiaria, lo que se obtenga, primero, deberá destinarse a resarcir el capital contable negativo del banco central que alcanzó 728 mil 684 millones de pesos al cierre de 2023.

En términos de remanentes cambiarios, el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto fue el más favorecido con la transferencia en tres ocasiones de los remanentes del Banco de México que sumaron amás de 592 mil millones de pesos.

¿Primeros conflictos?

Cuando se confirmó la adhesión de la empresaria Altagracia Gómez al entonces equipo de campaña de Claudia Sheinbaum, algunos de los bancos que atienden a sus compañías mostraron cierta inquietud por dicho acercamiento y por potenciales conflictos de interés en caso de que la otrora candidata ganara las elecciones tal como sucedió y posteriormente se formalizó el nombramiento de Altagracia Gómez como coordinadora del Consejo Empresarial, una especie de puente entre el gobierno y el sector empresarial.

Apenas el mes pasado se informó un acuerdo del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec con Grupo Minsa, propiedad de Altagracia Gómez, para el servicio de traslado de granos de maíz desde los Puertos de Coatzacoalcos, Veracruz, y Salina Cruz, Oaxaca, hacia la planta de harina de maíz de Minsa en Jáltipan, Veracruz.

Y más recientemente se supo que Dina, otra de las empresas que conforman el Grupo Promotora Empresarial de Occidente, será la encargada de construir la carrocería de los autobuses eléctricos Taruk, un proyecto encabezado por el Conahcyt, y la UNAM, cuya primera unidad, diseñada totalmente en México, ya comenzó a circular en la capital del país, y que se espera sea uno de los proyectos prioritarios en los planes del gobierno federal y de la CDMX.

Lecciones internacionales

Este fin de semana, el SBC Summit en Lisboa congregó a más de 25 mil delegados y 500 directores de la industria del juego, para reafirmar su posición como uno de los eventos más importantes del sector a nivel mundial. México estuvo representado por Miguel Ángel Ochoa Sánchez, presidente de la AIEJA. Durante el evento, se desarrollaron más de 200 conferencias que abarcaron temas como las apuestas deportivas, la regulación del juego en línea y el uso de inteligencia artificial en la industria, y así brindar a los participantes una visión clara de hacia dónde se dirige este mercado, y sobretodo el avance de la regulación de donde México tiene mucho que aprender, y aplicar, de otros países más avanzados en la materia y que promueven el crecimiento sostenible de dicha industria.

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