En la asamblea general anual en París, el director general de Kering, Francois Pinault, manifestó su descontento por el desempeño de la dueña de Gucci durante los primeros tres meses del año, aunque subrayó que el problema de la compañía no es reciente, porque ha presentado diversas contrariedades desde el año 2020.
La familia de Francois Pinault controla la empresa de moda francesa con una participación del 42% en Kering y 59% de sus derechos de voto, según Bloomberg.
Por su parte, el patrimonio del director general del conglomerado está valorado en 29,400 millones de dólares (mdd), según el Índice de Millonarios del medio al 24 de abril de 2024.
El empresario dijo a los inversionistas que aunque la situación era una “preocupación permanente” para Kering, sus equipos están decididos a que Gucci y las otras marcas del conglomerado sean más exclusivas y deseables.
Están decepcionados, están frustrados; yo también, soy el primero, estén seguros de eso
añadió Pinault.
Gucci es superada por sus competidores
Las acciones de Kering, que controla marcas como Gucci, Yves Saint Laurent, Balenciaga y Bottega Veneta, han caído un 18% este año en comparación con los incrementos del 6.4% del LVMH y el 20% de Hermes, que son considerados sus mayores competidores.
Por su parte, Kering anunció que las ganancias del primer semestre podrían presentar hasta una caída del 45% a inicios de esta semana. Francois Pinault refirió que estos resultados están lejos de los objetivos del grupo.
Los directores del conglomerado refirieron que el bajo desempeño de Gucci se remonta a la pandemia de COVID-19, cuando la marca no actualizó su apariencia, aunque reiteraron que se encuentran trabajando para impulsarla.
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