Bimbo se identifica como la empresa panificadora más grande del mundo. A través de sus casi 80 años de operación ha visto pasar a varias generaciones de trabajadores y directivos. Sin embargo, entre todos ellos, existe un personaje que destaca por haber sido el primer empleado de la compañía del Osito y por la trayectoria de 68 años en la organización: Roberto Servitje Sendra.
Roberto Servitje es el hermano menor de Lorenzo Servitje, uno de los fundadores de Bimbo, quienes comenzaron a vender pan un 2 de diciembre de 1945. En ese momento, esta figura tenía sólo 17 años, pero decidió incorporarse como trabajador y fue ganando relevancia.
Algunas décadas después, Roberto Servitje tomó cargos más relevantes hasta convertirse en CEO de Bimbo. Finalmente, dirigió uno de los procesos de expansión más grandes que ha experimentado la compañía panificadora y fue presidente de la misma hasta 2013, cuando decidió retirarse.
Roberto Servitje, el primer empleado de Bimbo
Según el perfil oficial, Roberto Servitje llegó a Bimbo a los 17 años de edad, cuando la compañía recién iniciaba. Se incorporó como supervisor de ventas, aunque su inquietud lo llevó a crear y encargarse del departamento de vehículos. Estuvo al frente de esta división durante varios años, aunque pronto decidió enfrentar nuevos retos.
El libro Bimbo: Estrategia de Èxito Empresarial, escrito por él mismo, explica que fue el primer empleado de Bimbo. Después confesó en el podcast Cracks del influencer Oso Trava que fue el segundo en llegar a la panificadora –tras el grupo de fundadores– ya que, antes que él, estuvo el responsable de la construcción de la fábrica de la empresa.
Sin embargo, recalcó que sí se trata del primer empleado en el área operativa Bimbo, ya que fue el fundador del sector de ventas.
Fue el encargado de llevar al Osito a Occidente
Cuando Bimbo daba sus primeros pasos en la Ciudad de México, rápidamente comenzó a satisfacer el mercado local. Por ese motivo, pronto decidió migrar hacia otros lugares y, en un comienzo, ‘aterrizó’ en puntos cercanos de los estados de Morelos, Hidalgo, Puebla, el Estado de México y Veracruz, según explicó Roberto en el podcast.
Después de algunos años trasladando productos con un bajo perfil, decidieron que era momento de abrir una fábrica en Guadalajara para continuar con el crecimiento. Tras discusiones, Roberto Servitje se postuló como el encargado de operarla y fue enviado para ‘tantear’ el terreno en el estado y sus alrededores.
Con este acontecimiento, se fundó Bimbo de Occidente en 1956. Esta división fue la encargada de surtir a estados como Jalisco, San Luis Potosí y Guanajuato; aunque también llevó los productos del Osito hasta puntos lejanos como Baja California. Gracias a la gestión de Roberto Servitje, quien era gerente general, tuvo un crecimiento muy rápido y logró insertarse en el mercado a nivel nacional.
Así Roberto Servitje se convirtió en CEO de Bimbo
En 1969, Roberto Servitje tuvo un receso de sus actividades empresariales para estudiar en la Universidad de Harvard. Para ese momento, ya era contador por la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), pero profundizó sus conocimientos con el curso Program Management Development de la institución estadounidense.
Tras ello, regresó a la empresa familiar como subdirector y continuó con la inercia de crecimiento que lo llevó a dejar este puesto con 13 fábricas en varios puntos del país. Para 1979, tomó el rol de CEO de Bimbo y, once años después, fue nombrado presidente ejecutivo de la organización.
Durante su gestión, sucedieron varios acontecimientos que marcaron el rumbo de la compañía, como la primera exportación a Estados Unidos y la creación de Bimbo Centroamérica, la filial que operó la primera planta fuera de la República Mexicana; años después también migraron hacia Sudamérica y arribaron a puntos de Argentina, Perú y Venezuela.
Se retiró tras 68 años en la panificadora
Roberto Servitje fue CEO de Bimbo hasta 1999, cuando ‘pasó la batuta’ a Daniel Servitje Montull, hijo de su hermano Lorenzo, el cofundador de la compañía, indicó en una entrevista con Forbes. Sin embargo, continuó como presidente del consejo de administración durante varios años más.
En paralelo, ocupó el cargo máximo dentro del consejo desde 1994 hasta 2013, cuando se retiró definitivamente de la vida empresarial tras 68 años dentro de Bimbo.
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