El nearshoring traerá grandes oportunidades para México y entre quienes más podrán beneficiarse son las pequeñas y medianas empresas (pymes), que representan a más de 5 millones de unidades económicas en el país.
Sin embargo, para ello tendrán que enfrentar el desafío de adaptarse a las necesidades de las nuevas empresas o los nuevos volúmenes
Durante la inauguración de la quinta edición del Foro CREO para emprendedores que organiza el Centro de Competitividad de México (CCMX); Adrián Estrada, director jurídico y de relaciones institucionales de Ternium México, dijo que desde su llegada a México en 2006, la empresa dedicada a la producción de acero se implementó un programa para desarrollo de mipymes para integrarlas a su cadena de proveeduría.
No es más que básicamente un esfuerzo focalizado y con objetivo claro para desarrollar la cadena de valor de la industria desde los proveedores hasta los clientes con un enfoque que es bien claro: ¿Cómo le hacemos para sustituir importaciones y que se compren insumos en México?
expuso el directivo de Ternium .
Desde su perspectiva, la clave para aprovechar este fenómeno que está atrayendo a nuevas empresas y mayores inversiones al país, que la Secretaría de Economía estima en más de 100,000 millones de dólares, está en replicar un fenómeno similar e impulsar a la cadena de valor local.
Sin embargo, cuestionó que a pesar de ser mayoría en el país, su productividad es menor. Pues mientras representan el 98.2% de las empresas, su aportación al PIB es apenas mayor al 50%.
“Eso quiere decir que el 1.8% de las empresas representan casi la mitad del PIB. Es un gran reto para las mipymes y es un gran reto para nosotros, las grandes empresas”, llamó.
En su reporte Zoom Nearhoring de marzo pasado, el banco Banorte previó que los sectores que tendrán mayor crecimiento por este fenómeno serán el agropecuario y la agroindustria, la producción de químicos y plásticos, ropa y accesorios, extracción de metales básicos, la maquinaria y equipo, aparatos eléctricos y electrónicos, el equipo de transporte para la industria automotriz y aeroespacial, y la producción de muebles y juguetes.
Nearshoring buscará proveedores en todo el país, no sólo en el norte
Aunque la mayoría de las inversiones han llegado a las entidades del norte por su cercanía a la frontera con Estados Unidos, las oportunidades para el nearshoring pueden aprovecharse para crear cadenas de suministro en el resto del territorio nacional.
El nearshoring es de gran impacto benéfico para México. Si esto continúa así, muchas pymes se van a poder sumar, no solamente en el norte del país. Porque si las grandes empresas o las transnacionales están llegando al norte del país, necesitan proveeduría que esté en el mismo territorio nacional. Eso abre una oportunidad no solamente para el norte, sino para todo el país
dijo Juan Carlos Ostolaza, director general del CCMX.
En ese sentido, resaltó que de la mano de la Embajada de Estados Unidos, ese organismo trabaja en impulsar el desarrollo de las pymes en el sur-sureste de México junto con los seis gobernadores de la región: Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
En su reporte, Banorte destacó que la región Peninsular se situó como la menor receptora de IED durante 2022 y que incluso en 2021 presentó una caída en este rubro de 31.5% a 1,354.4 millones de dólares.
“A pesar de la debilidad relativa de los flujos hacia esta región, fue capaz de incrementar la captación de recursos externos en 3 sectores fundamentales con potencial económico derivado del nearshoring: Energético (301.2 mdd); Construcción (301 mdd); y Transporte, correos y almacenamiento (152.7 mdd)”, señala el documento.
Y si bien se está desarrollando fuertemente la parte agroindustrial, en Tabasco se impulsa el desarrollo de la industria metalmecánica para el sector automotor, al igual que en Yucatán, donde también se trabaja en el desarrollo de software.
“Entonces la región sur sureste también debe incorporarse a este momento. El reto es cómo los vamos preparando, ¿no? ¿Cómo vamos preparando y desarrollando la estructura empresarial que hay en la región para poder integrarlos a estas cadenas de valor?”, concluyó.
En relación con las pymes, resaltó que los principales desafíos están en convencerlos de integrarse a la formalidad. Y aunque también tienen problemas para sumarse a la tecnología y tener acceso a financiamiento, resolver el primer reto disminuiría los otros dos.
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