El peso mexicano sigue rompiendo un máximo tras otro; sin embargo, los operadores parecen estar dejando de lado las advertencias de que está sobrevalorando considerablemente.
Apenas esta semana, la moneda nacional logró alcanzar su mejor nivel desde diciembre de 2015, repuntando junto con los mercados globales tras la publicación del dato inflacionario de Estados Unidos.
La moneda de México se ha convertido en una de las que más terreno ha ganado ante el billete verde a lo largo del año, sólo por detrás del peso comlobiano, al considerar los mercados emergentes.
El peso se ha visto beneficiado por la creciente tendencia del nearshoring, las remesas y las apuestas de un ciclo de flexibilización retrasado.
El estratega de BBVA México, Miguel Iturribarria, escribió en una nota a los clientes que el peso tenía un mayor impulso y debería mantenerse fuerte en los próximos meses, aunque esperaba que su valuación estirada eventualmente favoreciera una depreciación.
No recomendamos vender el peso en corto todavía, ya que es caro por su alto carry y porque esperaríamos una moneda relativamente estable en los próximos meses
indicó el especialista.
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Dólar tropieza
Gran parte de los beneficios del peso y otros activos de riesgo en el mundo se han dado por la caída global del dólar, que se agudizó luego de que la inflación estadounidense reportara un enfriamiento.
El dólar ha bajado casi un 13% frente a una canasta de monedas desde el máximo de dos décadas del año pasado y se encuentra en su nivel más bajo en 15 meses.
La debilidad del dólar puede ser una bendición para algunas empresas estadounidenses, ya que una moneda más débil hace que las exportaciones sean más competitivas en el extranjero y hace que sea más barato para las multinacionales convertir las ganancias extranjeras nuevamente en dólares.
Los mercados emergentes también se benefician, porque la caída de la moneda estadounidense hace que la deuda denominada en dólares sea más fácil de pagar.
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Con información de Bloomberg y Reuters