Vender Prosa a un jugador existente en el mercado, como Visa, podría traer beneficios, aunque se requieren más acciones para fomentar la competencia en la red de pagos con tarjeta.
La empresa mexicana de procesamiento de pagos electrónicos es una de las cuatro cámaras de compensación (o switches) autorizadas para procesar las operaciones en la red de pagos nacional, junto a E-Global, Mastercard y Visa.
Sin embargo, en diciembre de 2020 la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) estableció en un dictamen preliminar que no existen condiciones de competencia efectiva en los servicios que ofrece la red de pagos, lo que afecta a los consumidores y comercios.
Una de la razones es que ocho bancos son copropietarios de las cámaras de compensación, lo que les da información privilegiada y les permite implementar esquemas comerciales que les dan ventajas sobre competidores.
Prosa pertenece a Santander, Banorte, Banjército, Invex, Scotiabank y HSBC, mientras E-Global está en manos de Citibanamex y BBVA.
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Carlos Valderrama, socio fundador de la firma Legal Paradox, comentó que tanto Visa como Mastercard son participantes importantes a nivel internacional que se harían aún más relevantes en el mercado local de adquirir a la empresa que permite más de la mitad de los pagos electrónicos en México.
Esto puede ser bueno o puede tener áreas de oportunidad. Un jugador como Visa tiene toda la experiencia, un stock en términos de infraestructura tecnológica importante, ha generado alianzas estratégicas, pero al final el número de participantes a nivel internacional o local es limitado
comentó en entrevista.
En su opinión, más que buscar una adquisición de Prosa por un competidor existente, es necesario implementar acciones que generen nuevos participantes de mercado y reglas en forma de una regulación secundaria que ayuden a una desconcentración.
“Con independencia de quién compre a Prosa, lo que nos tendría que preocupar es generar más competidores, obliga a replantear y modernizar la oferta. El momento en que soy preponderante pierdo el sentido de lo que quiere el cliente en realidad”, dijo Valderrama.
Única red
De acuerdo con el dictamen de Cofece, si bien la normativa permite la operación de varias redes de pagos con tarjeta, en la práctica solo existe una que “aplica reglas que imposibilitan la coexistencia de otras redes de pago con menores cuotas, mejores servicios y mayor seguridad en las transacciones”.
Lo anterior constituye una de las barreras de entrada para nuevos competidores, por lo que el regulador propuso medidas como desincorporar el 51% de las acciones de E-Global y Prosa.
En un estudio publicado a principios del año pasado por Fintech México y el despacho De la Calle, Madrazo, Mancera, coincidió en la necesidad de reducir la participación de los bancos en las cámaras de compensación para que exista competencia en las redes de pago.
(México) tiene que acabar con el conflicto de interés de que la banca sea dueña de las cámaras de compensación. Mientras esto no suceda, todo el sistema está en manos de los bancos accionistas, que participan en todo el proceso de la red de pagos
se lee en el análisis.
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Unos meses después del informe de Cofece, en junio de 2021, Reuters reportó que la red de pagos estaba explorando una venta de la compañía valorada en más de 1,000 millones de dólares, aunque las fuentes consultadas apuntaron que no había garantía de que se llegara a un acuerdo.
Según columnistas financieros, Visa es una de las interesadas en adquirir a Prosa, aunque de manera oficial la empresa manifestó no tener información sobre el tema.
Decisión final
Tras emitir el dictamen preliminar, Cofece indicó que los agentes económicos interesados en el procedimiento podrían presentar sus manifestaciones y alegatos para que el Pleno emita la resolución final.
El plazo para concluir el proceso se pausó en septiembre pasado, porque solo contaba con cuatro de los cinco comisionados necesarios para votar el tema.
Sin embargo, con la ratificación de Andrea Marván Saltiel como comisionada del órgano regulador el 13 de diciembre, el Pleno de Cofece acordó reanudar el plazo de sesenta días hábiles a partir de esa fecha para difundir la resolución final del expediente, con lo que debería emitirse en las primeras semanas de marzo.
