Los resultados positivos del IGAE, el PIB de Estados Unidos y las exportaciones mexicanas alientan a que el crecimiento de la economía nacional cierre el 2022 por encima de las expectativas.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) creció 4.7% a tasa anual en agosto, la mayor alza en los últimos 13 meses.
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Además, el IGAE dio la sorpresa, ante el actual contexto internacional, al ubicarse 1.1% por encima de febrero del 2020, antes de que llegara la pandemia de COVID-19 al país
Mientras las exportaciones mexicanas, también con cifras ajustadas por estacionalidad del Inegi, ascendieron a 51,450 millones de pesos en septiembre pasado, que significó una cifra récord.
Este monto, tras dos caídas al hilo, fue 4.98% superior a agosto pasado, siendo la mayor tasa de crecimiento en los últimos siete meses.
Impacto al alza por el mayor socio comercial
La dinámica del IGAE y de las ventas al exterior se explica principalmente por el repunte de la economía estadounidense en el tercer trimestre del año, al ser nuestro mayor socio comercial.
Según la primera estimación de la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio de la Unión Americana, el Producto Interno Bruto (PIB) del país vecino del norte creció 2.6% a tasa anualizada, con ajuste estacionario, en el periodo julio-septiembre del año en curso.
Dicho aumento se dio después de las caídas de 0.6% en el segundo trimestre y de 1.6% en los primeros tres meses del año, es decir, tras una fase recesiva. Se suma que la actividad económica de Estados Unidos se colocó por encima de los pronósticos de mercado, que preveían un alza de 2.4%.
Las cifras de comercio exterior son positivas y alientan la idea de que el crecimiento en la actividad se sostendrá en cierta medida al cierre de año
indica Monex.
Economía mexicana retirará presiones
Para el grupo financiero, hay algunos indicios de desaceleración en el mercado interno, como lo es la caída de 2.20% mensual en las importaciones de bienes de consumo, pero prevé que la economía evitará un paro en seco durante el cuarto trimestre.
Añade que la moderación del déficit retira presiones a la coyuntura para el peso mexicano y permite que la estabilidad que le ha caracterizado durante octubre se prolongue.
“Así, aunque noviembre suele ser un mes en el que nuestra moneda se deprecia, las variaciones podrían darse en una anchura acotada, sin que el promedio de cotización mensual se despegue mucho de los 20.00 pesos”, sostiene Monex.
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Persisten riesgos en EU
Por su parte, el Grupo Financiero Base aseguró que la economía de Estados Unidos retomó su expansión durante el tercer trimestre, por lo que baja la probabilidad de recesión en el corto plazo.
Pero no se elimina para el largo plazo, pues persisten los riesgos de la alta inflación, alzas en tasa de interés, alto endeudamiento, disrupciones en cadenas de suministro y riesgos asociados a la guerra entre Rusia y Ucrania
ahondó Base.
Monex también estima una fase recesiva cercana si se consideran los datos de octubre a la baja del consumo y de las exportaciones, así como el rezago con el que opera la política monetaria sobre las fuerzas de la demanda.
Si la posición de la economía estadounidense en el último trimestre del año e inicios del 2023 es vulnerable, la actividad económica de México podría sufrir un revés.
