En cuestión de días, Unifin borró poco más de 6,000 millones de pesos de su valor de mercado, en medio de un colapso sin precedentes de sus acciones, mientras la empresa atraviesa momentos financieros complicados.
La capitalización de mercado de la arrendadora mexicana pasó de 7,410 millones de pesos el 5 de agosto a 1,407 millones al viernes 12 de agosto, de acuerdo con datos de Bloomberg.
Con ello, el precio de las acciones de Unifin se desplomó 81.8%, la caída semanal más profunda desde que la compañía debutó en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en 2015.
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Una semana volátil
El lunes pasado, la BMV suspendió las acciones de Unifin que en ese momento caían más de 14%. En los días posteriores las bajas fueron más pronunciadas y el precio de los títulos bajó a un mínimo histórico de cierre de apenas un peso el 10 de agosto.
Durante la jornada del jueves las acciones repuntaron 219%; sin embargo, no lograron recuperar las pérdidas que ya acumulaban. Dicha alza se explica porque algunos inversionistas aprovecharon la caída para especular con la empresa, según analistas.
Unifin, que es parte de las empresas que usualmente tienen poca liquidez, es decir que casi no son operadas, tuvo un incremento inusual en el volumen de acciones que cambiaron de manos.
A lo largo de la semana 44.7 millones de títulos fueron operados. Para comparar, en la semana previa el volumen fue de 771,960 acciones.
La crisis de Unifin
Unifin informó al mercado el 8 de agosto que suspendió el pago de intereses y capital de su deuda con ciertos acreedores, salvo obligaciones bajo estructuras de bursatilización privadas.
La empresa dijo que no cuenta con la liquidez suficiente para cumplir con sus obligaciones debido al entorno complejo en el sector de instituciones financieras no bancarias.
EL CEO reportó que Unifin debe 20,910 millones de pesos a casi una veintena de bancos, entre los que se encuentran Nacional Financiera (Nafin), Scotiabank, Santander y Blue Orchard, que también están expuestos a los incumplimientos de Crédito Real.
Bajo la asesoría de siete firmas, la empresa ahora analiza las alternativas que tiene para reestructurar su deuda y lograr acuerdos con sus acreedores, pero en incierto el tiempo que esto llevará.
Tras el comunicado de Unifin enviado a la BMV, las agencias calificadoras Fitch Ratings, Standard & Poor’s y HR Ratings han bajado las notas crediticias de la compañía.