Los precios del petróleo cerraron al alza este viernes, registrando su mejor ganancia semanal en más de tres meses, ya que el mercado continuó recuperándose de los temores de los choques de la demanda debido a la variante ómicron de COVID.
El contrato de enero de WTI de Estados Unidos subió 1%, a 71.67 dólares. Durante la semana, el índice subió 8.2%, la ganancia semanal más pronunciada desde un aumento del 10% en el período que terminó el 27 de agosto, según Dow Jones Market Data.
Mientras que el Brent del Mar del Norte para entrega en febrero ganó 1%, a 75.15 dólares por barril, registrando una ganancia semanal de 7.5%, su mayor avance semanal desde finales de agosto.
Los precios del petróleo marcaron su mayor ganancia semanal desde agosto, “a pesar de la incertidumbre en curso que gira en torno a la variante omicron”, dijo a MarketWatch, Lukman Otunuga, gerente de análisis de mercado de FXTM.
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El petróleo, en general, se han visto afectados por las preocupaciones sobre la demanda debido a la propagación de la nueva variante ómicron de COVID-19 desde fines de noviembre, con restricciones impuestas nuevamente a la actividad del consumidor en partes del mundo, incluido el Reino Unido, esta semana.
Sin embargo, los analistas dicen que el peor de los casos para el virus puede que ya se haya tenido en cuenta en la oferta y la demanda de energía. No obstante, persisten las preocupaciones sobre la variante, que según un estudio es 4.2 veces más transmisible que la versión delta en sus primeras etapas.
Por otro lado, hay otras señales bajistas en aumento. De acuerdo con Bloomberg, los comerciantes se enfrentan a la perspectiva de un debilitamiento del mercado físico del crudo en Asia, a pesar de la decisión de Arabia Saudita de aumentar los precios del petróleo en enero.
