Los fabricantes de automóviles Ford, Volkswagen y Daimler están luchando para lidiar con el impacto de la escasez global de chips, y los ejecutivos de cada una de las compañías advierten que es probable que la falta de silicio siga siendo un problema.
El presidente ejecutivo de Volkswagen, Herbert Diess, el presidente ejecutivo de Daimler, Ola Kallenius, y el presidente del consejo de administración de Ford Europa, Gunnar Herrmann mencionaron en el Salón del Automóvil de Múnich que es difícil saber cuándo se resolverá el complejo problema, de acuerdo con CNBC.
Volkswagen, el mayor fabricante de automóviles de Europa, ha perdido participación de mercado en China como resultado de la escasez de chips, mencionó Diess.
“Somos más afectados en China que en el resto del mundo. Por eso estamos perdiendo participación de mercado”, agregó.
Diess mencionó que cree que los problemas de escasez de chips comenzarán a disiparse a medida que los países reduzcan la transmisión de COVID-19, pero espera que haya una escasez general de semiconductores durante algún tiempo.
Crisis de materias primas
Herrmann, de Ford Europa, estima que la escasez de chips podría continuar hasta 2024, y agrega que es difícil precisar exactamente cuándo terminará.
Se cree que la escasez se ha visto agravada por la transición a los vehículos eléctricos. Por ejemplo, un Ford Focus generalmente usa aproximadamente 300 chips, mientras que uno de los nuevos vehículos eléctricos de Ford puede tener hasta 3,000 chips.
Más allá de los chips, ahora hay otras escaseces con las que lidiar. Ford se enfrenta a una “nueva crisis” en materias primas, comentó Herrmann.
Kallenius de Daimler señaló que espera que el tercer cuarto sea el “punto mínimo” de las interrupciones.
“Ese parece ser el trimestre que se verá afectado de manera más significativa por esto”, indicó.
La escasez de chips ha afectado a la industria automotriz más que a cualquier otra. Las líneas de montaje se han cerrado y algunos coches ahora se envían sin funciones que se basan en semiconductores.