Las ventas minoristas en Estados Unidos cayeron 1.1% en julio respecto al mes previo, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio.
La cifra fue peor a la contracción de 0.3% esperada por analistas.
La caída en el séptimo mes del 2022 se dio después del crecimiento de 9.7% observado en junio del mismo año.
Las ventas minoristas excluyendo los automóviles y autopartes mostraron una disminución de 0.4%.
Las ventas minoristas corresponden al componente de gasto del consumidor del Producto Interno Bruto (PIB).
Los resultados de julio son señal de una desaceleración en el consumo ante las disrupciones en las cadenas de suministro y la nueva ola de contagios que se comenzó a observar desde principios de julio, de acuerdo con Banco Base.
Inventarios crecen en junio
Los inventarios de las empresas estadounidenses aumentaron sustancialmente durante junio, aunque la escasez de materias primas sigue frustrando los esfuerzos de los vendedores minoristas de automóviles por reabastecerse, señaló el Departamento de Comercio.
Los inventarios de las compañías crecieron 0.8% mensual tras avanzar 0.6% en mayo, en línea con las expectativas de los economistas y analistas.
Por su parte, los productos existentes incrementaron en 6.6% anual en junio.
Los inventarios del comercio minorista aceleraron 0.3% en el mismo mes, tal como se estimó en un informe anticipado publicado el mes pasado. Esta alza se produjo tras una caída de 0.9% en mayo.
Por otro lado, los inventarios de vehículos motorizados disminuyeron 0.3%, según las estimaciones del mes pasado. De acuerdo con especialistas, la escasez mundial de semiconductores está socavando la producción de automóviles, lo que hace que las existencias se agoten y frenan las ventas al por menor.
Los inventarios del comercio minorista, excluyendo los automóviles, que entran en el cálculo del PIB, aumentaron 0.5%, en lugar del 0.6% estimado el mes pasado.
Los inventarios de las empresas se agotaron a un ritmo elevado en el segundo trimestre, en un contexto de fuerte demanda interna alimentada por el enorme estímulo fiscal y la reapertura de la economía tras las perturbaciones sufridas al principio de la pandemia de COVID-19.
El gobierno informó el mes pasado de que el gasto de los consumidores repuntó en el segundo trimestre, con un sólido aumento de los desembolsos en bienes, incluso cuando la demanda vuelve a girar hacia los servicios debido a la vacunación contra el COVID-19.
El crecimiento de dos dígitos del gasto de los consumidores en el último trimestre ayudó a elevar el nivel del PIB por encima de su máximo en el cuarto trimestre del 2019.
Se espera que la reconstrucción de los inventarios respalde el crecimiento económico en la segunda mitad del año.
Los inventarios al por mayor aumentaron 1.1% en junio. Las existencias de los fabricantes avanzaron 1.0%.
Las ventas de las empresas aumentaron 1.4% en junio, tras caer 0.2% en mayo. Al ritmo de las ventas de junio, las empresas tardarían 1.25 meses en vaciar sus estanterías, frente a los 1.26 meses de mayo.